Unos 220 kilómetros de ida y vuelta de media es lo que tienen que recorrer las personas pertenecientes a la Zona Básica de Salud de Sanabria para recibir la tercera dosis de la vacuna contra el COVID-19 –del 1 al 4 de diciembre– en el recinto ferial del Ifeza en Zamora. El malestar es patente para los mayores de entre 60 y 69 años, que a diferencia de los mayores de 70, no pueden recibir la dosis de recuerdo en el centro de salud comarcal.

A la distancia se suman problemas de conciliación de los horarios de los transportes públicos para acercarse hasta la capital y del centro de la ciudad hasta el extrarradio de la urbe donde se encuentra el recinto ferial. Ello supone perder prácticamente todo el día en Zamora. Tiempo y dinero que se ahorran otros usuarios “nosotros no vivimos al lado de Zamora”, se quejaba uno de los vecinos de Puebla, que hacía pública su queja y la de otros usuarios.

Las personas de la Alta Sanabria podrán vacunarse en su propia Zona de Salud, ya que las distancias, como el caso de Porto, son de 350 kilómetros de ida y vuelta, de punta a punta de la provincia. Para esta tercera dosis de recuerdo tendrán que llamar a su centro de salud.

El representante comarcal de COAG, José Manuel Soto, destacó la labor del equipo sanitario del Centro de salud de Alta Sanabria, en Lubián, y de su coordinador que “se han pasado toda la pandemia vacunando y preocupándose de los vecinos de la Alta Sanabria”. Soto instó a los responsables de los centros de Sanabria y Carballeda a tomar ejemplo porque han conseguido que los vecinos “mayores de 60 años no tengan que desplazarse a Zamora para recibir la tercera dosis”.

"Hay ansiedad y nerviosismo, nos tratan como borregos, vamos donde nos manden"

Pueblos como Porto, tienen una distancia hasta la capital de 350 kilómetros de ida y vuelta, de ahí que se haya pedido vacunar en la Zona Básica de Salud.

“En este caso posible vacunar en Carballeda o Sanabria, lo mismo que se han desplazado equipos a vacunar a los mayores de 70 años en los Centros de Salud. Hay ansiedad nerviosismo y nos tratan como borregos, vamos donde nos manden. No hay voluntad de facilitar la atención sanitaria y lo que se está haciendo es facturar que se garantiza la asistencia a todos los ayuntamientos, somos 28 ayuntamiento pero ¿cuántos pueblos somos y cuantos van a mantener cerrados?”.

Reclamó al presidente de la comunidad “que pare la reorganización porque es un desmadre. La única solución es presionar y presionar y copiar del hospital de Verín, en Orense, que le costó trabajo pero Feijoó tuvo que dar marcha atrás”.