“Tengo 81 años y no me voy a dejar pisar”. Estas palabras de Clemencia Barrio ilustran su batalla contra el tránsito continuado de camiones cargados de pinos que pasan por delante de su casa desde hace más de un año en el límite entre los términos de Rioconejos y Anta de Rioconejos.

El ritmo de camiones ha bajado en las últimas semanas, dos o tres diarios, pero ha habido días de hasta 10 y 11 camiones cargados circulando por su puerta. “Si quieren sacarlos que arreglen este camino y hagan una carretera”, exigen los vecinos directamente perjudicados, porque en su día se destinaron fondos para una carretera por este camino que no se hizo.

La carretera se hizo por Anta de Rioconejos, pero los camiones no pueden circular por el casco urbano porque las calles son estrechas. Clemencia Barrio señala que hay confusión porque el camino de Rioconejos y la carretera de Anta llevan el mismo número de vía.

El tránsito constante ha deteriorado el camino, y además exporta polvo por todo el vecindario, extremo que corroboran otros vecinos de la zona alta de Rioconejos.

Este problema se ha comunicado al Ayuntamiento de Asturianos, ya que Rioconejos es una de sus pedanías, aunque “nada pueden hacer” porque los pinos proceden de otro municipio “pero los perjuicios los sufrimos en Rioconejos”. Clemencia no ha tenido reparo en confrontar sus quejas y llamar la atención a con los conductores de los camiones.

Un camión cargado de pinos pasa por el camino. | A. S.

“Si quieren sacar los pinos que construyan una carretera. Esto está hecho un desastre”. De esos polvos y tras estas lluvias, nuevos barros han reventado el camino, han aparecido baches e incluso se ha hundido por el peso dejando las cunetas más altas que la propia vía agrícola.

La salida para los camiones que sacan los pinos del municipio vecino de Rosinos, para esta octogenaria “este no es el camino, es por El Puente de Sanabria, por carretera”.

Este trasiego de pinos no reporta ningún beneficio al pueblo , “son del monte de Anta, Monterrubio, Rosinos y Villarejo”, cuatro localidades del municipio de Rosinos de la Requejada, distinto al de Rioconejos, que pertenece a Asturianos. “Que se gasten el dinero en hacer este camino y en hacer una carretera. Ahora dicen que no hay dinero”, exige la octogenaria.