Las localidades alistanas de Figueruela de Arriba y Moldones podrán en marcha hoy miércoles sus dos nuevas ETAP (Estaciones de Tratamiento de Agua Potable) que garantizarán la prestación del servicio de abastecimiento domiciliario libre de hierro y manganeso a lo largo de los 365 días. Ayuntamiento de Figueruela de Arriba y Diputación de Zamora recibieron ayer ambas obras.

Al acto de entrega asistieron el alcalde del municipio Carlos Pérez Domínguez, los alcaldes pedáneos de Figueruela de Arriba (Carlos Pérez Sanabria) y Moldones (Mariano Manjón Rodríguez) y el vicepresidente tercero y diputado de medio Ambiente Javier Faúndez Domínguez.

En Moldones se pasa de los 1.320 miligramos de manganeso por litro a sólo 12. En Figueruela de Arriba de los 180 de baja solamente 2,2 miligramos

Francisco Javier Manteca Benéitez (Ingeniero Técnico de Obras Públicas) fue el encargado de redactar el proyecto de la Estación de Tratamiento de Agua Potable) de Figueruela de Arriba con un presupuesto base de licitación para su ejecución material mediante contrata de 100.168 euros, de los cuales el 90% financió la Diputación de Zamora y el 10% restante el Ayuntamiento de Figueruela de Arriba.

Los trabajos fueron adjudicados a la empresa “North Line de Madrid que presentó la oferta más ventajosa: 69.575 euros, formalizándose el contrato el día 18 de agosto de 2020. El plazo de ejecución era de sólo seis meses. Figueruela de Arriba se abastece actualmente de un acuífero natural situado en el paraje de “Malcocinado”, en las proximidades de la Sierra de la Culebra, hacia la raya con Mahide (Vidoleo), desde el cual se suministra también líquido elemento a otro de los siete pueblos del Municipios: Gallegos del Campo.

El acuífero da caudal suficiente para abastecer a la población en otoño, invierno y primavera cuando el gasto ronda los 50.000 litros diarios, sin embargo es insuficiente para el verano cuando la población se multiplica por dos y hay días donde el consumo ronda los 150.000 litros.

Fotografía aérea de Figueruela de Arriba. | Ch. S.

Este año, coincidiendo con las fiestas de verano de Santa Irene, ello dio lugar a tener que cortar el suministro durante varias horas , por la noche, para que el depósito de almacenamiento y distribución pudiera recuperarse.

La solución pasó, en 2020, por la perforación de un pozo de sondeo junto a deposito, en una finca adquirida en su día a un vecino del pueblo por el Ayuntamiento.

El problema surgía al realizarse la correspondiente analítica del agua que presentaba unos altos índices de hierro y de manganeso por encima de los permitidos por la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León, por lo cual, sin tratamiento, no era acta para el consumo alimentario.

Ello llevó al Ayuntamiento a optar por la única solución viable y posible: habilitar una depuradora para la reducción del manganeso hasta los límites marcados y permitidos por la legislación vigente. La solución consiste en elevar el agua desde el sondeo para verterlo en un nuevo depósito de agua bruta de 10 metros cúbicos donde se realizara la cloración previa con el fin de que precipiten el manganeso que pasa posteriormente a un filtro “Bipaca” donde se elimina este elemento.

A continuación se pasa por un filtro con sistema “Katalox” y finalmente se deposita el agua tratada en el depósito de distribución en el que se aportará cloro libre que estará regulado con una estación de medición. El sistema dispone de válvulas motorizadas para el control del lavado de los tanques de filtración.

Para albergar todos los equipos se ha construido una caseta de 9 metros de largo, por 4 de ancho y de entre 3,20 y 4 de alto, con paredes de termoarcilla enfoscadas y pintadas tanto en los interiores como los exteriores.

Instalación en Figueruela de Arriba L. O. Z.

Garantizados hasta 150.000 litros al día para afrontar el verano

La depuradora de Figueruela de Arriba cuenta con una capacidad para alcanzar unos valores puntales de hasta 150.000 litros en verano (julio y agosto) y unos estándar de 50.000 en otoño, invierno y primavera. Moldones pondrá hoy fin a un calvario que dura ya 39 años, iniciado allá por 1982, cuando se habilitó la primera red de abastecimiento de agua con la construcción del primer depósito de almacenamiento y distribución en el paraje de “Las Cruces” con una autonomía de 80.000 litros y un pozo de sondeo que se taponó a causa del abundante hierro. El pueblo cuenta con la particularidad des ser históricamente el único de la comarca de Aliste donde llegó a tener que racionarse el agua potable durante la posguerra: cada familia tenía derecho a un cántaro al día y 16 litros más si tenían que amasar pan. El motivo fue la fuerte sequía del año 1942. La “Fuente Grande” (también conocida como “Fuente Romana”) durante siglos dando servicio pasó durante el verano a contar hasta con guarda para salvaguardar su aguas. Llegado el abastecimiento casero lo de Moldones ha sido un sin vivir y tras otros dos sondeos más fallidos, –en 2016 se hizo uno de 180 metros y no dio caudal–, ya en 2018 se perforó el cuarto en “Las Peñicas” (hacia el termino de Gallegos del Campo) profundizando hasta 120 metros en las entrañas de la tierra para garantizar agua suficiente. Una vez se consiguió por fin tener agua en abundancia surgía otro gran y grave problema: los índices de hierro y de manganeso eran tan altos (1.320 miligramos-litro) que superan los permitidos por la Consejería de Sanidad para su consumo alimentario. La única alternativa posible era construir una Estación de Tratamiento de Agua Potable que afrontó el Ayuntamiento de Figueruela de Arriba en colaboración con la Diputación de Zamora financiado un 90% y 10% respectivamente de una licitación que ascendía 120.805,27 euros. Desde hoy la ETAP de Moldones permitirá la depuración y eliminación del hierro en unos valores estándar de 14.500 litros diarios, considerados suficientes para los meses de otoño, invierno y primavera; y unos valores punta de hasta 39.000 litros al día para la época de verano.