El cabreo de los representantes agrarios y de todos los ganaderos se ha escuchado durante todos estos meses de gestión por la protección del lobo. La movilización se materializó en abril en Zamora, la capital de la provincia española con más ejemplares censados de lobo ibérico. Un centenar de vehículos y sus cláxones invadieron las avenidas más céntricas para protestar contra la decisión de la ministra Teresa Ribera de incluir al lobo ibérico en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección (Lespre). Este cambio que hoy plasma el Boletín Oficial del Estado recoge la prohibición del control poblacional del lobo ibérico mediante la práctica cinegética, a pesar de que los ataques al ganado no dejan de aumentar en Castilla y León, especialmente al sur del Duero, donde la caza de la especie ya está prohibida.