Los colegios del alfoz de la capital son la excepción que confirma la regla. Frente al descenso generalizado y progresivo de alumnos en la mayor parte de las localidades de la provincia, los centros escolares de los municipios cercanos a la capital no sólo no pierden alumnos, sino que consiguen sumar un buen número de escolares cada año.

Al colegio público de Morales del Vino han llegado nada menos que 27 niños de tres años que han arrancado el presente curso escolar en el aula de primero del ciclo de Infantil. Un elevado número que incluso ha obligado a realizar un desdoble en dos grupos al superar el ratio de alumnos, establecido en 25 niños, pero reducido a 22 como medida excepcional durante la pandemia para la constitución de los denominados “grupos burbuja”.

“Estamos muy contentos de tener tantos niños y de que mucha gente joven haya elegido Morales como lugar de residencia y para educar a sus hijos”, resalta la alcaldesa de la localidad, Carmen Lorenzo. Aún así, matiza que la cifra de alumnos que acuden al colegio podría ser mucho mayor, “teniendo en cuenta que hay familias que viven en Morales, pero trabajan y llevan a los niños a colegios de Zamora, por cuestión de horarios”. Con los nuevos niños que se han incorporado este año, el colegio de Morales ya supera los 200 alumnos. En este centro se imparten los tres cursos de Infantil y los seis cursos de primero a sexto de Primaria. Para mantener las instalaciones en óptimas condiciones, el Ayuntamiento realiza cada año una importante inversión “que se lleva buena parte del presupuesto municipal”, resalta la alcaldesa.

El reciente comienzo del curso escolar tampoco ha podido ser más positiva en el colegio de Arcenillas, que alcanza un récord de once alumnos, la cifra más alta desde que reabrió el colegio hace cerca de 15 años”, subraya el alcalde de la localidad, Enrique Rodríguez. El centro escolar ha registrado un gradual aumento de escolares en los últimos años que durante el presente curso escolar ha permitido dividir en dos grupos a los alumnos: siete de Infantil y cuatro de Primaria.

A través de una subvención de la Diputación de Zamora y la Junta de Castilla y León, en el colegio de Arcenillas se ha sustituido el desagüe del baño del nuevo aula, y además se ha reparado toda la acera situada junto al edificio de las escuelas. También se ha instalado una puerta adaptada a normativa en el cuarto de la caldera, además de nuevos suelos en el aula nueva.

Los colegios del alfoz de la capital arrancan el curso a rebosar de niños

El de Villaralbo es uno de los pocos colegios de las localidades del alfoz que no comparte este aumento de alumnos durante el presente curso escolar, al menos en Infantil. De hecho, la escasez de niños de primero de este ciclo ha obligado a reagruparlos con los de segundo, “aunque esperamos que esta situación se solvente en próximos cursos”, según destaca la concejala de Cultura, Pilar Gallego. Por el contrario, el curso de 4º de Primaria permanece desdoblado por superar el ratio.

En cuanto a las últimas reparaciones, en este centro educativo se ha pintado el interior del colegio, además de otros trabajos de acondicionamiento, reparación y adecuación, como la reposición de luminarias, la reparación de llaves de paso, el arreglo de humedades y sustitución de canalones. En el exterior del centro educativo también se han realizado trabajos de poda y desbroce del patio, así como el saneamiento de parte del muro y reparación de la puerta de entrada de acceso a infantil. A ellos se suman los trabajos de limpieza y desinfección realizados en todo el recinto educativo.