El pueblo de Villarrín de Campos amanecía ayer sobresaltado por la violenta agresión sufrida por una vecina del pueblo. La Guardia Civil investiga las circunstancias del apuñalamiento de una mujer de 69 años cuando estaba durmiendo en su casa.

Los hechos sucedieron en la madrugada del domingo al lunes cuando, según la versión oficial, una persona encapuchada entró en el domicilio de la víctima, en el número 28 de la calle Rosario, y la agredió. Las investigaciones siguen la pista de un sospechoso.

La mujer fue trasladada en UVI móvil al Hospital Virgen de la Concha de Zamora donde su situación es “estable” y se encuentra fuera de peligro.

Para cortar habladurías y sospechas infundadas, desde la Subdelegación del Gobierno se descartaba horas después que la agresión estuviera relacionada con un episodio de violencia de género.

Agentes de la Benemérita permanecieron a lo largo del día en el Villarrín de Campos investigando los hechos y se llegó a realizar algún registro. Por la tarde, desde la propia subdelegación del Gobierno confirmaba el avance de la investigación, en “aras de esclarecer el caso y que reine la tranquilidad en el municipio, aunque aún no se ha practicado ninguna detención”.

Agentes de la Benemérita frente a la puerta de la calle Rosario donde se produjo la agresión. | José Luis Fernández

Los hechos se desencadenaron a las 3.40 minutos de la madrugada del lunes al martes, cuando el Centro de Emergencias 112 recibe una llamada solicitando asistencia médica para una mujer que se encontraba tendida en su vivienda y con varias heridas sangrantes causadas por arma blanca. El subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, apuntó que la mujer estaba “sola en casa, durmiendo, y vio una silueta de una persona encapuchada” que al ser sorprendida la abría apuñalado.

Tras recibir la llamada de emergencia, el 1-1-2 dio aviso de este incidente a la Guardia Civil (COS) de Zamora y al centro coordinador de urgencias (CCU) de Emergencias Sanitarias - Sacyl, desde el que se movilizó una UVI móvil y personal sanitario de Atención Primaria del centro de salud de la localidad.

En la propia vivienda, el personal sanitario de Sacyl atención a la mujer herida, que fue trasladada en UVI móvil posteriormente al Complejo Asistencial de Zamora, donde se recupera sin que su vida corra peligro. Tras el episodio violento, la vivienda fue precintada y custodiada por agentes de la Guardia Civil que, según precisó Blanco, trabajan “para detener lo antes posible al agresor”.

Fuentes vecinales han confirmado que la mujer agredida pasaba largas temporadas en el pueblo, cuando no en Galicia donde vive con su familia. El suceso provocó un impacto total en un pueblo “donde nos conocemos todos” precisaba una vecina quien se enteró de los hechos a través de los medios de comunicación.