“Nuestros pueblos necesitan más sanidad pública”, “Sin sanidad digna, más despoblación”, “A ellos no les importa nuestra salud”. Sayagueses de muchos pueblos participaban ayer en Bermillo de Sayago en la quinta concentración de este verano para reclamar “una sanidad digna en la comarca”. Una concurrida manifestación que terminó con un espontáneo recorrido por la carretera CL-527 entre proclamas y ruidos de cacerolas.

Los vecinos reivindican la sanidad pública como “un derecho de los españoles” que en esta comarca de Sayago consideran “muy mermado”, ya que de los 18 médicos asignados a la Zona Básica de Salud para 43 localidades, “faltan 7 y a ello se añade que tres médicos de la plantilla tienen edad para estar jubilados y continúan pasando consulta, no sabemos por cuánto tiempo más. Estos médicos están exentos de realizar guardias” denunciaba Prudencia Garrote, portavoz de la plataforma ciudadana.

Concentración a las puertas del Centro de Salud. | Cedida

El problema se agrava en verano, sin sustituciones en las vacaciones de los sanitarios, de tal forma que los que trabajan tienen que acumular varios pueblos en cada jornada con el consiguiente saturación de trabajo. “En el mes de agosto atienden a los 43 pueblos cinco médicos y algunos días solo tres. El desastre es total cuando hablamos de las guardias: un médicos y un enfermero cuidan de nuestra salud de tres de la tarde a ocho de la mañana”. Los sayagueses entienden el esfuerzo de los sanitarios y “agradecemos su compromiso” precisó Garrote.

Los sayagueses se dirigen hacia la carretera. | Cedida

Es el panorama descrito en la quinta concentración de los sayagueses, dispuestos a mantener estos actos para que no pasen casos como la semana pasada a una señora, que “vino a urgencias se encontró con la puerta del Centro de Salud cerrada” porque el equipo de guardia estaba atendido una urgencia “in situ”. “Esta situación es muy grave, pone en peligro nuestra vida” se expuso a las puertas del Centro de Salud de Bermillo hasta donde se han desplazado vecinos de toda la comarca y algunos alcaldes, los fijos de Fermoselle, Fariza y Roelos, y ayer también los de Moral y Luelmo.

Los manifestantes a lo largo de la travesía de Bermillo, en la carretera de Fermoselle. | Cedida

Los vecinos temen la implantación definitiva del llamado “Plan Aliste” que introduce la atención telefónica, junto a la presencial; o que los pacientes puedan ser atendidos en otro pueblo o “que todos los profesionales estén conectados para que puedan pasar consulta en cualquier consultorio de la Comunidad con un portátil y una red wifi”. En medio de la incertidumbre que genera el nuevo sistema, los ciudadanos piden que se cubran las plazas de médicos, que las guardias se doten con dos profesionales y que se abran los consultorios.

“Sin sanidad digna, más despoblación” decía uno de los carteles. Por eso también se justifica una batalla que vuelve el día 28.