Las piscinas municipales se han convertido en el principal reclamo en la comarca natural de Alcañices, Tábara y Alba en una semana marcada por la ola de calor y que seguramente será la de mayor población estacional con la masiva presencia de emigrantes en los pueblos.

Varios bañistas, en la piscina de Rabanales. | Ch. S.

La piscina municipal de Alcañices cuenta estos días con una gran afluencia de bañistas no sólo de la villa y de los pueblos de los alrededores, sino también de la vecina región de Tras os Montes en Portugal. La novedad este año está en la puesta en marcha de la piscina para niños lo cual ha contribuido a incrementar un aforo, no sólo por la presencia de los más pequeños, sino con la de sus padres, pues otros veranos, si no podía ir con los hijos tampoco podían ir ellos en muchos casos al tener que instalar piscinas portátiles en sus casas.

Usuarios de la piscina de San Vitero. | Ch. S.

Rabanales es otro punto clave en la elección de los bañistas al contar con unas magníficas instalaciones, incluida su piscina infantil, en pleno casco urbano. Las otras apuestas han sido la de San Vitero, Villalcampo y Muelas. En la zona de Tábara la única alternativa es la de Moreruela.

La gran decepción del verano ha sido la playa fluvial de Ricobayo de Alba, única declarada como tal en la zona por la Junta de Castilla y León, que ha tenido que ser cerrada al público a causa del desembalse del “Salto de Ricobayo” que ha dejado separada la zona de arena con las aguas, con una escollera de grandes piedras.

La fuerte sequía ha traído consigo que muchos ríos alistanos que contaban con áreas recreativas con presas que podían ser utilizadas puntualmente para bañarse se han secado. Los primeros ríos en secarse fueron el Cebal a su paso por Villarino, Grisuela y Fradellos, y el Mena por Tolilla , Lober y Gallegos del Río. Luego le tocaba el turno al Aliste que esta semana ya ha dejado de correr incluso en Mahíde a un paso de su nacimiento en el “Portillo” de San Pedro las Herrerías en la Sierra de la Culebra. El Espinoso se secó en Campogrande, Bercianos y Valer y El Cabrón, nada más pasar Flechas. En este caso El Cabrón mantiene (recupera) su cauce en Villarino de Manzanas pero lo hace gracias a las aguas que le aporta el arroyo Melendro de la Sierra de la Culebra. Solo el Frío mantiene su cauce por Sarracín , Riofrío y Valer.

Tomás Castaño Fernández, encargado de la estación meteorológica de “María Pinta” de Alcañices a sus 92 años sentencia que “el cambio climático esta aquí y no es normal lo que está pasando. Antes, poco o mucho, llovía durante todo el año y en verano eran frecuentes las tormentas. Ahora ni eso”.

En la tierra tabaresa, con una sola zona de baño en Moreruela, la gran apuesta para el próximo verano de 2022 será la del Ayuntamiento de Tábara que construirá sus piscinas con un presupuesto base de licitación de 500.000 euros según el proyecto técnico del ingeniero civil Manuel Ángel Rodríguez Manzano. Tábara fue el primero de los 102 pueblos de la comarca en contar con piscina en 1942 en el paraje de “La Folguera” al instalarse allí el Campamento Preliminar Militar (IPM) en la finca de 2,7 hectáreas situada a orillas de la Nacional 631 siendo cruzada por los arroyos Folguera y Urri.

La segunda piscina se ubicó también en los años cuarenta en el campamento Juvenil “San Ignacio de Loyola” en San Pedro de las Herrerías.

Tierra de Alba es la única de las tres subcomarcas que carece de piscina abierta, lo cual dejará de suceder en 2022. La previsión es invertir 114.000 euros en finalizar las obras de las piscinas iniciadas durante el mandato del alcalde Manuel Prieto de las Heras allá por 2010.

El Ayuntamiento de Riofrío de Aliste, cuya Corporación Municipal preside el alcalde Germán Matellán Fernández, prevé habilitar una “Piscina Ecológica” en la zona del área recreativa de “El Picón” de Sarracín (cercano a la Sierra de la Culebra) aprovechando las aguas de río Frío.

La única piscina pública cerrada este verano en la comarca ha sido la del Campamento Público de Turismo “Sierra de la Culebra” de Figueruela de Arriba. El motivo fue que el adjudicatario que la gestionó durante años decidió dejar su explotación de la noche a la mañana y cuando el Ayuntamiento recibió el camping descubrió que había dado de baja las instalaciones eléctricas.

El Ayuntamiento presidido por Carlos Pérez Domínguez encargó a “Electricidad Carlos” de Villarino tras la Sierra los trámites y cometidos para recuperar la luz algo que no parece pueda suceder hasta septiembre. Luego habrá que sacar a licitación de nuevo las explotación de las instalaciones para reabrir de nuevo el campamento.