La explotación de los embalses, conforme a las necesidades del sistema, se realiza siempre en contacto y coordinación con las autoridades competentes, ha precisado Iberdrola tras hacerse público la apertura de un expediente informativo. La hidroeléctrica asegura que “Ricobayo no se ha vaciado, sino que está cumpliendo con su función en el momento más necesario: producir energía para el suministro de la demanda y desplazar a las tecnologías más caras en la conformación del precio de la electricidad”. Apunta que “todos los embalses, y en especial los de regulación como es el caso del embalse de Ricobayo, son importantes reservas de energía, que se encuentran a disposición del sistema eléctrico”. 

Todos los embalses, y en especial los de regulación como es el caso del embalse de Ricobayo, son importantes reservas de energía, que se encuentran a disposición del sistema eléctrico.  Como sucede en Europa y en España, a traves del mercado, se utilizan cuando más aportan al sistema y más se necesitan, bien porque no hay disposición suficiente de otras fuentes de generación o porque sustituyen a otras más caras. Y siempre atendiendo a su carácter limitado. 

Apunta Iberdrola que Ricobayo “en un año típico, se llena con las lluvias para posteriormente generar energía en la época seca, siempre que se demande y cuando es más útil para el sistema”. Ningún otro de los embalses del eje del Duero tiene capacidad de regulación. Precisa la empresa que los porcentajes “en ocasiones no muestran la realidad: Ricobayo, con el nivel actual, tiene más volumen de agua embalsada que Aldedávila y supera lo almacenado por los otros dos embalses zamoranos del Duero juntos, Villalcampo y Castro”.

Precisa que la Confederación Hidrográfica registra de todos los embalses información en tiempo real de diferentes parámetros operativos. Algunos relacionados con calidad del agua y otros con las variables de operación, entre ellas el nivel de embalse. 

"La gestión de Ricobayo está atendiendo también a la única concesión de abastecimiento de la que hemos sido informados, como es el caso de Muelas del Pan, con cuyo alcalde estamos en permanente contacto y coordinación. Somos conscientes del contexto pero la explotación se está realizando dentro de los rangos establecidos y con normalidad. En muchas ocasiones se han registrado cotas similares e incluso inferiores en Ricobayo; hasta en ocho en los últimos 25 años".

El embalse de Ricobayo requiere de menos de 900 millones de metros cúbicos de agua para volver a su nivel máximo y, siendo la aportación media del río Esla de casi 3.600 millones de metros cúbicos de agua al año, "es probable que el embalse recupere niveles altos en cuanto comiencen las lluvias. Así ha sido siempre en los últimos 50 años". 

Precisa la empresa hidroeléctrica que la explotación de los embalses se realiza siguiendo todos los condicionantes medioambientales establecidos. "La monitorización de los parámetros de calidad de agua es permanente en todas las épocas del año y, aun así, en los últimos meses se han reforzado los controles de calidad. No ha sido necesaria ninguna medida extraordinaria al no haberse detectado ningún parámetro que presente valores fuera de lo habitual".