«Convertir la N-122 en autovía no es asunto de tiempos, es una cuestión vital”

–Nunca fue fácil vivir en los pueblos en tierras fronterizas, ni ser alcalde, ni vecino, en la lucha contra la adversidad. ¿Cual es o debería ser el objetivo de todos: las autoridades y residentes?

–El progreso y el desarrollo social y económico. Podremos acertar, unas veces, y equivocarnos, otras, porque somos humanos, pero los alcaldes y concejales trabajamos día tras día para ofrecer las mejores infraestructuras y servicios públicos en nuestros pueblos intentando conseguir y ofrecer la mejor calidad de vida que sea posible a nuestro vecinos y sus familias. Solo así y generando empleo podremos frenar la despoblación rural. Tenemos que trabajar duro y dar todo lo que tenemos para que las familias jóvenes puedan quedarse a vivir dignamente en Aliste.

–Alcañices y Aliste viven sus segundo verano de pandemia ¿Cómo está la situación?

– Complicada. Está claro que ha mejorado gracias en parte a la vacunación. Vivimos en una comarca donde la mayoría de los vecinos residentes somos personas de la tercera edad y por tanto de alto riesgo. Estar vacunados da un poco más de tranquilidad, pero seguimos teniendo algo de miedo y respeto a la pandemia porque el COVID-19 sigue ahí y las variantes pueden complicar la situación. Por suerte la mayor parte de la población es muy responsable y ahí seguimos tomando precauciones y respetando las medidas impuestas por las autoridades sanitarias.

–¿Se nota el incremento de visitantes en los pueblos?

– Sí. Aliste es una tierra de emigrantes. Casi todos lo fuimos alguna vez en nuestras vidas y a lo largo de todo el año, cuando estás lejos de tu tierra en tu corazón y en tu memoria siempre está tu pueblo y tus paisanos, esperando que llegue el verano para regresar. Es gratificante ver que niños y adolescentes, hijos del éxodo rural, siguen teniendo a Aliste como algo que es parte de sus vidas y eso es bueno para que no se rompa la cadena del intercambio generacional. Mientras sigan viendo como algo suyo lo que fue de sus padres y abuelos siempre habrá esperanza.

–¿Resultó duro para los ayuntamientos alistanos suspender las fiestas patronales?

–Más que duro, que también, fue muy doloroso. A todos nos gustan las fiestas y sabemos y somos conscientes de lo que suponen las patronales para cada pueblo, pues son los únicos días del año donde nos podemos reencontrar casi todos los vecinos residentes y los emigrantes en convivencia y hermandad. Pero la realidad es la que es y no hay otra: la salud, ahora más que nunca, es lo primero. Además hemos de ser respetuosos con esas familias que han perdido algún ser querido por el coronavirus u otra causa y al dolor se ha añadido ni poder velarlos o hacer funeral en su día. Desde la tristeza abrimos las puertas a la esperanza de que la pandemia llegue a su fin pronto y para el próximo verano se recupere la normalidad y podamos ya celebrar las fiestas como antes.

–La Nacional 122 sigue siendo una pesadilla para Aliste.

–Convertir la Nacional 122 es ya una cuestión de Estado: no estamos hablando de viajar con más comodidad o ahorrar tiempos en nuestros desplazamientos, estamos hablando de la vida o la muerte y por desgracia quienes más fallecen en los accidentes que en ella se producen son alistanos y trasmontanos porque somos sus principales usuarios. Ahora mismo da miedo coger el coche e ir a Zamora. Si la ida es mala, la venida aún peor pues por la tarde tienes al sol de frente y no ves ni lo que viene y va. Hay personas de los municipios de Rábano, Trabazos y Alcañices que prefieren rodear e ir por la ZA-P-1405 de Zamora a Mahide para no cruzarse con los camiones. Cada vez pasan más y todos trailers de transporte internacional. Llegó hora de dar un paso al frente todos, ayuntamientos, Diputación de Zamora, Junta de Castilla y León, Estado y Unión Europea y buscar la mejor y más pronta solución que puede y debe de pasar por reconvertir la Nacional 122 en autovía. El Estudio de Impacto Ambiental termina en 2022: dejar caducarlo sería una irresponsabilidad total y condenarnos a muerte a los alistanos y a los trasmontanos. Esa es la realidad.

–Alcañices sin lugar a dudas se lleva la peor parte. ¿O no?

–Eso es evidente pues tenemos una travesía donde no paran de pasar trailers y para colmo de desgracias solamente tenemos un paso de peatones: llevamos años pidiendo un paso con semáforo frente a la calle Labradores y el Santuario de la Salud y no hay manera. Vivimos en un peligro permanente y la única solución es la autovía y la correspondiente variante.

–¿Cuál es la prioridad en infraestructuras básicas urbanas ahora mismo en el municipio?

–Solucionar definitivamente de una vez por todas los problemas de abastecimiento de agua en Vivinera causados por los altos índices de hierro y manganeso por que las familias no pueden seguir así. Para ello hicimos un nuevo pozo de sondeo que da suficiente agua y de calidad y ya tenemos concedida la ayuda de la Diputación de Zamora. Ahora tenemos que construir una nueva red del pozo de sondeo hasta el depósito de almacenamiento y distribución de “El Gorjón” pero nos hemos encontrado que al tener que cruzar por Sahú y ser Monte de Utilidad Pública necesitamos autorización de Medio Ambiente y los trámites burocráticos nos están retrasando mucho las obras. Tenemos que darle una solución ya.

–¿Cómo está el proceso de las nuevas concentraciones parcelarias en el municipio?

–Desde el Ayuntamiento trabajamos ya en las concentraciones de Alcañices y Vivinera. Las cosas van a buen ritmo y si se cumplen los plazos estarían listas en 2024. Decidimos optar por las concentraciones de iniciativa privada donde el ayuntamiento colabora económicamente con la Junta; de esta manera podremos ir acortando los plazos. Vivinera ya tiene el Estudio de Impacto Ambiental. La idea es iniciar también la de Santa Ana.

–Nuevos tiempos y nuevas infraestructuras públicas.

–Hemos construido y abierto finalmente la piscina de chapoteo para los niños junto a la de adultos del Alto la Atalaya. Era muy necesaria puse los niños también tienen derechos a tener su zona de baño. También hemos habilitado la pista de pádel. Únicamente nos falta instalar los cristales pero la empresa adjudicataria no los encuentra por ningún sitio y eso está retrasando su apertura al publico. La depurador del río Angueria estará lista para funcionar este verano.

–¿Cómo va le programa Leader del grupo Adata?

–Bien. Se han subvencionado 138 proyectos. La previsión es crear alrededor de 53 puestos de trabajo directos y mantener 43 empleos, más el beneficio indirecto por sinergia de muchos otros. Para la cuarta y última fase disponemos de 914.697 euros para ayudar a los emprendedores de la zona.

–¿En que consistirá la estrategia de emprendimiento de la mujer rural en el ámbito agrario y agroalimentario?

–El Consejo de Gobierno de la Junta ha otorgado a Adata 91.000 euros de fondos públicos destinados a financiar labores de asesoramiento y tutorización, formación y motivación al empleo, así como de divulgación de actuaciones en el marco de la estrategia de emprendimiento de la mujer rural en el sector agrario y alimentario hasta 2023. La mujeres son parte vital en Aliste, Tábara y Alba y esperamos que estas ayudas contribuyan al desarrollo del medio rural y a fijar población es lo pueblos.

–¿Qué medidas ha tomado la Mancomunidad Tierras de Aliste con vistas al verano?

–Ayuntamientos, alcaldes y concejales, lo mismo que los vecinos, somos conscientes de que en estas fechas estivales se incrementa el número de residentes en los pueblos y por consiguiente la generación de residuos sólidos urbanos. Por ello y para mantener un servicio adecuado a las necesidades y circunstancias hemos reforzado la recogida con dos operarios más. Así podemos realizar dos rutas diarias, alternativamente, un día se recoge de la Nacional 122 hacia Portugal y el otro hacia la ribera del Aliste. Se recoge también los sábados y el objetivo es que los pueblos mas grandes y con más población tengan recogida un día si y otro no. Con vistas a primeros de septiembre un año más recogeremos gratuitamente todos los voluminosos y los electrodomésticos.