Los vecinos de Moraleja se quedarán por segundo año consecutivo sin celebrar las fiestas patronales de La Magdalena, que hubieran arrancado esta misma semana, a partir del 22 de julio. El empeoramiento de la situación sanitaria, con un aumento de casos de coronavirus en toda la provincia, ha llevado al Ayuntamiento de este municipio a tomar esta drástica decisión, que supone la suspensión total de la programación festiva.

A diferencia de otras localidades donde sí se mantendrán una limitada oferta de actos culturales, en Moraleja se ha optado por prescindir de cualquier evento como medida de prevención para evitar la propagación de posibles contagios.

“No vamos a hacer nada de nada porque tal y como están las cosas ahora mismo nos parece lo más razonable”, explica la concejala de Cultura de Moraleja, Eva María Pérez. Al margen de la suspensión de las fiestas patronales, tampoco se encuentran previstos otros actos culturales a lo largo del verano. “Este año, y ya van dos, nos ha tocado así, pero esperamos que el año que viene podamos celebrar todo lo que no hemos podido”, asegura esperanzada la concejala de Cultura.

Los últimos datos de la Junta de Castilla y León sobre la evolución del coronavirus sitúan a Moraleja del Vino en riesgo muy alto de contagios. En concreto, registra una elevada incidencia de 1.558 casos por cien mil habitantes en los últimos 14 días y ha contabilizado once casos en los últimos siete días.

La mayor parte de las localidades de la comarca de Tierra del Vino también aparece en rojo en el mapa del coronavirus facilitado por la Junta de Castilla y León, que se corresponde con un riesgo muy alto de contagios. Los municipios de mayor tamaño, como Morales del Vino (con diez contagios en la última semana) o Villaralbo (con tres casos en los últimos siete días) reflejan una elevada incidencia en las últimas semanas. Por el contrario, otras localidades como El Perdigón, Tardobispo, San Marcial, Gema, El Piñero, El Cubo del Vino, Cuelgamures o Peleas de Abajo son algunas de las poblaciones que permanecen en blanco en el mapa de coronavirus, es decir, hasta ahora han logrado librarse de nuevos casos y no registran ningún nivel de alerta. En un punto intermedio se encuentran localidades como Sanzoles o Venialbo, que aparece en color naranja, lo que las sitúa en un nivel intermedio de riesgo de contagios. Una situación que ha obligado a suspender las fiestas previstas este verano en la mayor parte de estas localidades de la provincia.

Villaralbo celebrará actos culturales puntuales y Fuestespreadas suspende el mercado romano

El Ayuntamiento de Villaralbo ha sido otro de los municipios que ha optado por suspender sus fiestas patronales previstas el próximo mes de agosto. En un comunicado, justifica esta decisión teniendo en cuenta que “el objetivo principal es garantizar la salud y la seguridad de todos los vecinos del pueblo, y la celebración de este tipo de eventos podría conllevar graves riesgos. Por ello, se toma está decisión con el convencimiento de que es la decisión más responsable que podemos tomar. Las celebraciones pueden ser focos de contagio y aparición de brotes que faciliten la transmisión del virus”.

En todo caso, el equipo de Gobierno puntualiza que los eventos culturales de este verano se van a centrar en diferentes actos en el patio del Salón Cultural, de tal forma que se puedan garantizar todas las medidas de seguridad, lo que incluye público sentado o el mantenimiento de distancia de seguridad, entre otras medidas.

Por su lado, otras localidades como Fuentespreadas han decidido suspender la edición del mercado romano que se encontraba prevista este verano. En su defecto, se ha acordado realizar alguna actividad simbólica el fin de semana del 20 al 21 de agosto.