Las piscinas municipales de Villalpando han comenzado la temporada de baño de 2021 con un mejor aspecto, pues el Ayuntamiento que preside Félix González Ares ha invertido 50.000 euros en introducir varias mejoras para garantizar el buen funcionamiento de estas instalaciones deportivas y de ocio.
Concretamente, se ha integralizado una de las piscinas grandes que presentaba varias filtraciones que ocasionaban grandes pérdidas de agua, con el consiguiente perjuicio para el medio ambiente y para las arcas municipales, ya que constantemente había que rellenar el vaso para compensar las fugas. Un problema que ha quedado solucionado con los trabajos financiados por el Ayuntamiento de Villalpando y ejecutados por la empresa Segopi, que ha impermeabilizado las paredes con una resina específica para este tipo de piscinas.
Por otro lado, el ayuntamiento también ha construido una caseta para la depuradora de la otra piscina grande, con el fin de sacarla de su anterior ubicación por debajo del suelo.
La depuradora soterrada se construyó en 2009 con los fondos que el Ayuntamiento de Villalpando recibió del Plan E del Gobierno de Zapatero para la realización de obras. Sin embargo, las continuas humedades en el espacio soterrado dificultaban a los trabajadores el día a día del mantenimiento de la piscina y de su depuradora. Ahora, la empresa Zamoragua se ha encargado de mover tanto la máquina como las conducciones a la caseta construida en la superficie, y mejor acondicionada para el manejo de la instalación.
Por otro lado, los trabajadores contratados por el Ayuntamiento de Villalpando con ayudas de la Junta de Castilla y León y de la Diputación de Zamora se han encargado de regar y mantener el césped antes del inicio de la temporada de verano para tener las instalaciones a punto para todos los visitantes.
La otra gran novedad es que el bar de la piscina, que permaneció cerrado en 2020, sí está abierto este verano. Aunque el primer concurso quedó desierto por falta de solicitudes para su explotación, el Ayuntamiento de Villalpando negoció con varios hosteleros del municipio y ya ha encontrado a un empresario dispuesto a hacerse cargo del negocio hasta el final de la temporada de baño.
Este año no se ha dividido el césped en parcelas, aunque se recuerda que sigue siendo obligatorio mantener 1,5 metros de distancia entre bañistas que no sean convivientes. En las taquillas de entrada se seguirán tomando los datos de todos los usuarios para poder llevar a cabo un rastreo en el caso poco probable de que surja un brote de coronavirus vinculado a la piscina.
El horario de baño es de 12 a 21 horas, aunque los usuarios pueden permanecer más tiempo tomado el sol, el acceso al agua está prohibido fuera de ese periodo.
