Aliste y Alba, uno de los arciprestazgos de la Diócesis de Zamora que más religiosos y religiosas aportó a lo largo de los siglos XVIII, XIX y XX a las misiones evangélicas y humanitarias en África (Angola y Mozambique), Asia (China), Oceanía (Australia) y América (Cuba, Panamá, Brasil y Colombia), contará este verano con un nuevo sacerdote: un brote verde en una tierra que llevaba muchos años sin ver el crecimiento de nuevas vocaciones.

La iglesia de San Andrés de Zamora acogerá el día 10 de julio, a las 11 horas, la ordenación sacerdotal, por parte del Obispo de Zamora Fernando Sánchez Valera, del diácono Agustín Crespo Casado, que durante los últimos años viene prestando su labor de apoyo al arcipreste Fernando Lorenzo Martín en las Unidades de Acción Pastoral de Alcañices, Nuez, Valer y Sarracín.

La primera etapa de Agustín Crespo Casado, camino del ya cercano sacerdocio, se inició en el Seminario Menor San Atilano cuando ya “tenía un cierto deseo de ser sacerdote, aunque era simplemente eso, solo un deseo. Para mi el seminario era un colegio a donde iba a estudiar, pero con esa inquietud vocacional”. Allí estuvo seis años, cursando los cuatro de Enseñanza Secundaria Obligatoria y los dos del Bachillerato.

En 2010 entraba en el Seminario Mayor, residiendo en Salamanca donde estudió en la Universidad Pontificia –Licenciatura en Estadios Eclesiásticos y Licenciatura en Teología Dogmática–, presentando su trabajo bajo el título “El hombre nuevo en Cristo. Una antropología teológica a partir de la celebración del sacramento del bautismo”. Realizó además el máster en Teología del Cuerpo que ofrece el Pontificio Instituto Teológico “Juan Pablo II”. Reconoce que ya con 18 años toma la decisión más en firme y “más en serio comencé los estudios en Salamanca”.

A partir de ahí llegó ya la tarea pastoral que comenzó en el Arciprestazgo de Sayago, colaborando a la vez en la parroquia de “María Mediadora” de Salamanca, en la de San Juan de Benavente, Cristo Rey de Zamora y Cáritas Diocesana para finalizar ya como diácono los dos últimos años en las tierras de Aliste.

Una vez sea ordenado, la eucaristía de acción de gracias tendrá lugar el día 11 de julio, domingo, en la parroquia de San Esteban Protomártir de Villalube. Tras años de diácono en Aliste, Agustín Crespo Casado presidirá su primera eucaristía en su tierra de acogida el día 17 de julio (sábado), a las 20 horas en Alcañices, en el Santuario Mariano Diocesano de Peregrinación de Nuestra Señora la Virgen de la Salud, patrona de la comarca de Aliste y una de las Siete Hermanas de España y Portugal.

Agustín Crespo Casado, nacido el 12 de marzo de 1992, aunque alistano de acogida es natural de Villalube. Su presencia en Aliste comenzó ya como seminarista cuando acudía cada Semana Santa a la Casa Rectoral de “Santa Eulalia” de Valer de Aliste donde residió primero Femando Lorenzo Martín, siendo así habitual su presencia en históricos actos como el del Descendimiento y Santo Entierro de Cristo cada Viernes Santo en Bercianos de Aliste. Durante dos años ha sido ya Agustín Crespo Casado parte imprescindible en las 28 parroquias de las de las unidades de acción pastoral de Alcañices, Nuez, Valer y Sarracín

Fue ordenado diácono en diciembre de 2016 ya entonces con el objetivo de llegar a ser presbítero: “Al principio cuando estás en el seminario estás preparándote, no pisas aún mucho el terreno de los pueblos, de las parroquias y no te das cuenta que vas a colaborar, a conectar con la gente, y al final eso es lo importante. No solamente eres tú el que ofreces y el que das, sino que bueno, hay un enriquecimiento de compartir con la gente y un testimonio muy grande al ver gente en las parroquias”.

El centro parroquial de la Virgen de la Salud de Alcañices acogía el pasado fin de semana –tras un año sin poder hacerlo a causa de la pandemia de coronavirus–, una reunión de los “celebrantes de la Palabra” de las unidades de acción pastoral de Alcañices, Nuez, Valer y Sarracín.

Los celebrantes de la palabra se han convertido en vitales para que los pueblos cuenten con actos religiosos los fines de semana y festivos, ya que con 28 parroquias a su cargo a Femando Lorenzo y Agustín Crespo les resulta imposible llegar a todas, aun contando con la ayuda en algunas ocasiones de Pedro González de Madrid. “Gracias por vuestra entrega y servicio. Hacéis una labor impagable”, les dijo el arcipreste tras abordar diferentes temas de interés y marcar las actuaciones con vistas a la época veraniega.

El campamento Como Enanos se celebrará el 19 al 29 de agosto para niños de toda la Diócesis

El Arciprestazgo de Aliste ha decidido finalmente recuperar el campamento “Como Enanos Verano” tras su suspensión en 2020 a causa de la crisis sanitaria global originada por la pandemia del coronavirus. Según manifiesta Fernando Lorenzo Martín, arcipreste director de Como Enanos: “Gracias a Dios, parece que la pandemia está remitiendo y nosotros no podemos quedar parados. Tenemos que ponernos en movimiento y por eso vamos a tener campamento. Será un campamento como todos los demás: genial, pero respetando una serie de medidas de higiene básicas que han sido dictadas por las autoridades sanitarias competentes y que nosotros respetaremos escrupulosamente para que todos nos los pasemos lo mejor posible”. Como Enanos Verano se celebrará en las instalaciones de Cáritas en el entorno natural del Lago de Sanabria del 19 al 29 de agosto y estará abierto a niños y niñas de 10 a 17 años de edad, no solo de tierras alistanas y albarinas sino de toda la Diócesis de Zamora. La familias podrán inscribir a sus niños hasta el día 7 de julio. No obstante han de tener en cuenta que las plazas son limitadas y se guardará riguroso orden, según fecha y hora de ingreso bancario. No se admitirán inscripciones fuera de plazo por motivos de organización. El precio se ha fijado en 160 euros por persona. En los casos de hermanos y familias numerosas baja a 140 euros. La salida tendrá lugar el 19 de agosto a las 9 horas en el pabellón del Seminario San Atilano de Zamora y a las 10 en el centro parroquial de Alcañices situado en la Plaza de Ferreras (junto a la iglesia de la Virgen de la Asunción). Los horarios cambian respecto a otros años debido a que se realizará una prueba de antígenos antes de subir al autobús. Será obligatorio acudir con mascarilla. Cualquier persona que de positivo en la prueba de antígenos no podrá subir al autobús ni participar en el campamento. Las visitas de familiares a los lugares de campamento quedan prohibidas “puesto que está demostrado que son contraproducentes, tanto para los participantes visitados, como para los que no lo son. En casos excepcionales se concertará una visita con conocimiento previo del director de la actividad”. El campamento fue puesto en marcha por los curas alistanos en el año 1987.