La recién nacida Kayla y sus padres, Andrea Viviana Ríos y Baltasar Quintana de La Fuente, se reencontraron este jueves con el equipo de “héroes” de Tábara –como así las han bautizado sus padres– que le ayudó a nacer. En la visita estuvieron la médico que acompañó el parto, la matrona, las enfermeras y los sanitarios y médicos del Centro de Salud tabarés que el pasado día 10 de junio tuvieron que atender un parto inminente.

La visita, cuando la pequeña cumplía ocho días, fue más tranquila y programada con la finalidad de dar personalmente las gracias a todo el equipo, por su atención y su trato en el nacimiento inesperado de la bebé. La pequeña Kayla nació en el Centro de Salud de Tábara, a medio camino, cuando viajaban en el coche particular de una vecina al Hospital de referencia a 120 kilómetros, Virgen de la Concha de Zamora, desde Trefacio y tras pasar por el Centro de Salud de Puebla de Sanabria para el inminente alumbramiento.

El Centro de Salud de Tábara se convirtió por unos momentos en paritorio atendido por los profesionales sanitarios que en ese momento, a las nueve de la mañana, atendían sus consultas.