La Plataforma Calabor, movimiento vecinal en contra de la mina de Valtreixal, trató ayer de presentar en el Ayuntamiento de Pedralba de la Pradería las más de 600 firmas contra el proyecto de la mina. También instan al Ayuntamiento a que “ceje en su empeño de permitir desarrollar la mina a cielo abierto Valtreixal o cualquier proyecto similar”.
Entre la documentación se incluyó el listado donde se relacionan unas 600 personas, vecinos del municipio y simpatizantes, directamente afectados por la realización del proyecto minero. Además de un documento elaborado con los datos extraídos del proyecto presentado por los promotores de la mina.
Otras 1.882 personas más han firmado en la plataforma digital Change.org la iniciativa de “Paremos la mina de Sanabria”, que se ha abierto para facilitar la firma de personas afectadas que prefieren demostrar su apoyo de esta manera. Esta iniciativa está directamente dirigida a la Junta de Castilla y León, pero es extensiva a cualquier organismo público involucrado en la concesión de licencias o cualquier parte del proceso de legalización de la explotación minera.
En la exposición de motivos señala el escrito que “recordamos al Ayuntamiento que muchos de los firmantes estamos ya aquí, apostando por otro tipo de desarrollo más acorde con la zona y con lo que representa, algunos con fuertes inversiones de vida y de futuro y que, gracias a la gestión de la Corporación que nos representa, nos vemos ahora amenazados por un proyecto del que no sacaremos más que problemas de salud para los vecinos, medioambientales para las generaciones futuras, además de una clara pérdida de calidad de vida en la comarca”.
Para la plataforma opositora “una decisión tan importante y peligrosa para nuestro futuro requiere tener en cuenta las opiniones de los afectados”.
Añaden que el proyecto inicial de la mina pretende ubicarse en zona Red Natura 2000, una protección europea que se otorga a zonas de alto interés medioambiental por ser de los últimos reductos de biodiversidad existentes en el continente. “Lo que tenemos a ojos de Europa es una joya. Además hace relativamente poco tiempo, también se incluyó como territorio de la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Meseta Ibérica”. La finalidad de estas zonas es asegurar la supervivencia a largo plazo de las especies y los hábitats más amenazados, contribuyendo a evitar la pérdida de biodiversidad provocada por las actividades humanas. “Lo que firmamos y afirmamos es lo que Red Natura defiende: promover actividades humanas tradicionales ya existentes, o con impacto nulo o positivo sobre el territorio”, algo “excluyente” con una mina a cielo abierto: explosiones, polvos contaminantes, vertederos con metales pesados, balsas de sustancias químicas, modificación del paisaje, contaminación directa de acuíferos necesarios para la biodiversidad de la zona y de la subsistencia de los vecinos aguas abajo.
Los firmantes aseguran que “no estamos en contra de proyectos en la zona, sino a favor de otro tipo de desarrollo”. Como alternativas proponen promover por parte del Ayuntamiento la creación de actividades que realmente reflejen la tradición sanabresa: apicultura, huerta, fomento del bosque que produce castañas, setas y diversos alimentos para los animales.
Otra propuesta es fomentar la venta de C02 a empresas contaminantes, como por ejemplo las mineras, o que quieran mejorar su responsabilidad corporativa. El Ayuntamiento solo se tendría que comprometer a plantar árbol autóctono y dejarlo vivir durante al menos 20 años. Proponen fomentar un trabajo como se hacía antiguamente con animales de carga y de tiro para arar alguna zona, en vez del uso de maquinaria pesada.
Un tercer punto, en relación a los anteriores, lleva al desarrollo de una granja de ganado de la zona para limpieza del monte, evitar incendios y propagar las semillas de manera natural.
Por último, quieren promover iniciativas para el cuidado de la población existente, con especial énfasis en aquellos que preserven la tercera edad.
