La localidad de Brandilanes, perteneciente al municipio de Fonfría, contará con una ETAP (Estación de Tratamiento de Agua Potable) en el paraje campestre de La Llaga con vistas a solucionar con carácter definitivo los problemas que vienen sufriendo a lo largo de los últimos años las familias del pueblo fronterizo con Portugal. La problemática surge al presentar las aguas altos contenidos de hierro, manganeso y arsénico, además de turbidez por encima de lo permitido por la Junta de Castilla y León.
La iniciativa corre a cargo del propio Ayuntamiento de Fonfría, cuya Corporación Municipal preside el alcalde Sergio López Vaquero, y será cofinanciada por la Diputación de Zamora a a través del Plan Sequía 2020.
“El agua es hoy día el bien más preciado para las familias del pueblo y su día a día. En Brandilanes tenemos problemas serios y con la depuradora vamos a solucionarlos definitivamente”, asevera el alcalde pedáneo Baudilio Martínez.
La obras, que salieron a licitación con un presupuesto de 134.996 euros, han sido adjudicadas a la empresa Ruberte en 87.044 euros. El plazo de ejecución está fijado en solo seis meses con lo cual la ETAP a mucho tardar debería estar en marcha antes del 10 de diciembre de 2021, ya que las obras fueron replanteadas hace tres días con la asistencia del vicepresidente tercero y diputado de Medio Ambiente, Javier Faúndez.
Brandilanes dispone en la actualidad de dos captaciones para el suministro domiciliario, la más antigua corresponde a un manantial y otra, la más reciente, un pozo de sondeo de 100 metros de profundidad: este acuífero subterráneo da un caudal de 8.000 litros a la hora (192.000 diarios). El depósito de almacenamiento y distribución de Brandilanes se ubica en la zona alta del pueblo, dista un kilómetro de las captaciones y cuenta con una autonomía de 250.000 litros.
La solución elegida por el Ayuntamiento de Fonfría y la Diputación de Zamora pasa por la construcción y puesta en marcha de una estación de tratamiento de agua potable basada en un proceso de sedimentación previa y tratamiento mediante filtración por diversos tanques, de tal manera que pueda garantizar la reducción del contenido de los valores fuera de cumplimiento hasta los límites marcados por la normativa vigente.
El proyecto incluye la construcción de una nueva caseta de 11x5 metros, con paredes de termoarcilla enfoscadas y pintadas con pintura plástica tanto en el interior como en el exterior, destinada a alojar los elementos eléctricos y equipos de tratamiento de las aguas de consumo. Contará con una altura variable de entre 3 metros en un lado y 4 en el otro, dando una pendiente del 20% a la cubierta. Esta estará formada por un forjado de hormigón armado y acabado en teja mixta, disponiendo de una lámina de impermeabilización.
En primer lugar, para reducir la turbidez se colocará un depósito de sedimentación natural de 5.000 litros, donde también se actuará con floculante para favorecer esa sedimentación. A partir de ahí el agua pasará al depósito de agua tratada, de 3x3 metros, y desde el que comienza la línea de agua en presión, llevando el primer filtro bipaca y desde aquí al filtro tripaca. Una vez que el agua ha superado estos filtros será necesario la colocación de equipos de bombeo de filtrado en contralavado, que a su vez servirá para el bombeo a los filtros de la siguiente fase.
La opción elegida en primer lugar es un filtro de Katalos, y una vez que el agua ha pasado por este tanque irá a otro de similares características que el anterior, con relleno de Bayoxide. En este tanque se producirá la retención de cualquier partícula que hubiera podido pasar al filtro anterior y la eliminación de manganeso y arsénico. Así mismo están proyectados para ejecutar la colocación de los equipos automáticos de cloración y de medición de pH y de cloro.
Para finalizar está prevista la limpieza de la parcela, mediante desbroce y excavación, compactando el terreno, así como el cerramiento de todo el recinto para incluir la caseta de alojamiento de los nuevos equipos, con una valla de alambre galvanizado de dos metros de altura con una puerta de acceso para el control de toda la zona, un requisito de obligado cumplimiento por la Junta de Castilla y León.
Según manifiesta el alcalde Sergio López Vaquero: “Garantizar un abastecimiento de agua a toda la población durante los 365 días del año es ahora mismo la gran prioridad de la Corporación Municipal, y por ello estamos trabajando en todas las actuaciones que creemos son más necesarias y urgentes en los ocho pueblos y siempre apelando a un consumo razonable por parte de todos los vecinos”.
La legislatura 2019-2023 está siendo vital para la mejora del servicio de abastecimiento de agua en el municipio de Fonfría, ejecutándose grandes obras gracias a la colaboración de la Diputación de Zamora (Medio Ambiente), que financia hasta el 90% del total.
El 21 de octubre de 2020, tras 46 meses obligados a abastecerse de agua enbotellada para el consumo humano, los vecinos de Arcillera podían volver a consumir el agua del grifo gracias a una potabilizadora que elimina el manganeso y garantiza 42.000 litros diarios en verano. Ascendía la inversión a 68.642 euros. En Fornillos de Aliste, con 114 habitantes, a finales de 2020 se puso en marcha el nuevo pozo de sondeo, con 120 metros de profundidad y un caudal de 8.000 litros de agua a la hora.
En Castro de Alcañices se perforó el año pasado por parte del Ayuntamiento de Fonfría un nuevo pozo de sondeo en el paraje “Cepedillo” (el cuarto en pocos años) y se habilitó una depuradora ,pues al echarle el cloro el agua adquiría un tono amarillento e insalubre. Ahora se ha perforado un nuevo pozo (el quinto), pendiente de legalizar ante la Comisaría de Aguas, y que “estará disponible en los próximos días”. Su objetivo será el de servir de apoyo a los otros pozos ya existentes en los momentos de mayor demanda, que suelen coincidir con los meses de julio y agosto.
Por otra parte se continúa con la renovación de las tuberías de las redes de abastecimiento de las localidades de Fonfría, Ceadea, Arcillera y Castro en algunas calles con muchos años y las consiguientes y continuas averías, que originan muchas pérdidas de agua.
En Moveros los propios vecinos han estado limpiando las fuentes de la localidad.
