El Juzgado de Instrucción de Puebla de Sanabria dictó orden de alejamiento para un empresario de 56 años de Puebla de Sanabria, que fue denunciado por una extrabajadora por un presunto delito de acoso. La joven ha presentado una nueva denuncia, el pasado miércoles ante el cuartel de la Guardia Civil de Puebla, por el incumplimiento presuntamente de la medida cautelar dictada a raíz de los hechos.
La extrabajadora denunció a su exjefe por un presunto delito de acoso en el entorno laboral y fuera de él. La juez instructora decretó, tras tomar declaración a las partes, la orden de alejamiento, de fecha 19 de abril de 2021, que estipula “prohibir” al empresario aproximarse a la joven de 22 años “a su domicilio, lugar de trabajo y/o lugar de estudios, así como cualquier lugar en el que pudieran encontrarse a una distancia inferior a 100 metros”.
La medida cautelar se hace extensiva a la prohibición de “comunicarse por cualquier medio de comunicación o medio informático, telemático”.
Los nuevos hechos, presuntamente cometidos, se resumen en una reiterada presencia del denunciado en los bares cercanos al domicilio de la denunciante, desde el mismo mes de abril, en ocasiones acompañado de otra persona.
Frecuenta los bares del pueblo
Se da la circunstancia de que la joven denunciante reside en otro pueblo y a una distancia considerable de Puebla de Sanabria, a más de 5 kilómetros del domicilio y del negocio del empresario. No era habitual ver al denunciado frecuentar los bares del pueblo donde reside su exempleada.
En estos momentos el empresario tampoco regenta ningún negocio en el lugar de residencia de la denunciante. La joven lo ha visto en reiteradas ocasiones, como así ha trasladado presencialmente en el cuartel de la Guardia Civil, hasta el punto de coartarse en el momento de salir de su propia casa para tratar de hacer una vida normalizada.
La joven comenzó a trabajar en el año 2018, confiada por el ambiente de amistad que tenían las dos familias, la del empresario y la de la joven. Con el tiempo la joven comenzó a ver cambios en la actitud de su jefe, al que trataba de evitar y alejarse de él, además de procurar no quedarse a solas.
El caso está en investigación tras los hechos acaecidos el 31 de agosto de 2019 cuando la joven acreditó ante el juzgado de Puebla de Sanabria la recepción de numerosos mensajes por las redes sociales para, supuestamente, controlarla y ejercer un dominio sobre ella, con la que tiene una diferencia de edad de 35 años. La empleada se vio obligada a dejar el empleo por esta situación.
El aumento de casos de Violencia de Género en las zonas rurales ha sido una preocupación constante por parte de la Subdelegación de Gobierno.
