Samir de los Caños cuenta con un nuevo vecino que ha superado la barrera de los cien años, toda una larga vida. Antonio Vicente Prieto, nació en Samir de los Caños un hoy ya muy lejano día 27 de abril de 1921 en el seno de una familia humilde, como la mayoría de Aliste en aquella época, y con una madre que se quedaba viuda cuando él contaba con tan solo tres años de edad, siendo el menor de cuatro hermanos: “Mi madre nos consiguió criar con una pareja de vacas y mucho esfuerzo”.

Recuerda Antonio Vicente Prieto que cuando creía que ya lo había vivido todo llegó la Guerra Civil, las miserias del racionamiento, una férrea dictadura y la anhelada y deseada democracia. El nuevo centenario ha tenido que soplar y apagar las cien velas en plena pandemia, alejado de la mayoría de su familia que por las restricciones de movilidad no puede acercarse a disfrutar de este cumpleaños tan especial.

Según manifiesta una de sus nietas: “Mi abuelo fue un incansable labrador, trabajador de sol a sol, haciendo surcos firmes y rectos. Como firme fue y es el amor por mi abuela Francisca, ya fallecida. Y como orgullo de su vida están sus cinco hijos (dos fallecidos siendo bebés), sus siete nietos y sus cinco bisnietos, que le queremos todos con locura. No es fácil llegara esa edad, pero menos lo es, llegar en plenas facultades físicas y mentales. Hoy podemos decir con orgullo que mi abuelo conserva una increíble memoria y una increíble curiosidad por la vida que le hace estar pegado constantemente a su radio, fiel compañera de sus pasos por los campos de Samir. Es un referente de esfuerzo y sacrificio, un luchador perseverante. Siempre has cuidado de tu familia y estamos agradecidos por todas tus enseñanzas”.