La Diputación de Zamora y el Ayuntamiento de Figueruela de Arriba han dado luz verde al inicio de las obras para mejorar los suministros de agua potable en las localidades alistanas de Riomanzanas y Villarino de Manzanas, ubicadas en el entorno natural de la Sierra de la Culebra. Ambas actuaciones están recogidas y serán financiadas dentro del Plan Sequía 2020 del área de Medio Ambiente.
En el caso concreto del pueblo de Riomanzanas, el objetivo principal se centrará en mejorar la calidad de las aguas a utilizar por los vecinos para su consumo humano, dado que se abastecen de una captación superficial que ahora se encuentra parcialmente cegada y no da suficiente caudal. Además, la instalación de cloración que existe en la localidad está muy lejos del depósito regulador. Para paliar esta preocupante situación y conseguir tal fin se procederá a la instalación de una estación tratamiento de agua potable (ETAP).
De momento se ha procedido al replanteo de ambas obras con la presencia del diputado de Medio Ambiente, Javier Faúndez Domínguez, el alcalde de Figueruela de Arriba, Carlos Pérez Domínguez, y la alcaldesa de Riomanzanas, Rocío Barrigón Veigas, junto a los técnicos de la Diputación de Zamora.
Las analíticas realizadas en las aguas de Riomanzanas presentan un resultado por encima de los límites permitidos por las autoridades sanitarias para los contenidos de coliformes totales y turbidez, así como contenido en manganeso.
La localidad de Riomanzanas se abastece de agua mediante una captación superficial justo en los inicios del arroyo “Fontano”, en el paraje de “El Palomar”, hacia la Sierra de la Culebra. Una captación que hasta ahora se hace mediante filtros naturales de piedras y dado que el acuífero proviene de la serranía ofrece aguas de mucha calidad, según los propios vecinos.
Los problemas comenzaron con el temporal del 21 de diciembre de 2019, cuando en el entorno de la Sierra de la Culebra cayeron alrededor de 100 litros de agua por metro cuadrado, lo cual llevó al arroyo Fontano (es el que cruza posteriormente por el pueblo) a arrastrar maleza y taponar los filtros de la captación superficial. Incluso hubo que abastecer al pueblo durante varios días con agua embotellada.
La institución provincial ha fijado el plazo oficial para la ejecución material de las obras en seis meses con un presupuesto total de adjudicación de 58.240 euros sobre una licitación inicial de 80.339,80 euros. El adjudicatario (provisional de momento) es la sociedad limitada “Proyectos y Desarrollo del Medio Ambiente”, que ofertó cinco años más de garantía, con lo cual será de seis. Se presentaron 9 empresas.
La primera actuación se centrará en mejorar la captación y para ello será necesario la consolidación del azud existente, dotándolo así mismo de una compuerta de la que actualmente carece. La nueva captación de agua se ejecutará mediante pozos de anillos con perforaciones laterales, colocando uno exterior y otro interior, entre los que se ubicará grava que servirá como un filtro natural para evitar la entrada de elementos no deseados. Desde dicha captación se dispondrá de una tubería de PE 110, en una longitud de 50 metros, para llegar hasta el pozo del agua bruta que se aloja en la caseta. Hasta aquí las aguas llegarán por gravedad.
El pozo de agua bruta se construirá de fábrica de hormigón armado y contará con unas dimensiones interiores totales de 2 por 2 metros y 2 metros de altura, con muros de 30 centímetros de espesor y forjado de viguetas para su cierre superior, colocando pates de acceso al fondo y una tapa metálica de acceso para personas. El pozo se alojará dentro de la caseta donde además se ubicarán los filtros, equipos de bombeo y cuadros eléctricos. Dicha caseta de obra de 5 metros de longitud interior por 3 metros de anchura, con paredes de termoarcilla enfoscadas y pintadas con pintura plástica tanto en el interior como en su exterior.
La solución adoptada consistirá en elevar el líquido elemento desde el pozo de agua bruta hasta el filtro “bicapa” en primer lugar, para posteriormente ser enviado hasta el filtro de carbón activo. Hecho esto se verterá el agua en el depósito de almacenamiento existente en la actualidad, desde el cual también se impulsará el agua para la limpieza de filtros.
Villarino Manzanas construye una estación de tratamiento e impermeabiliza su depósito
En Villarino de Manzanas los trabajos tendrán como objetivo el acondicionamiento de los dos depósitos existentes situados en el paraje de “El Castrico” de 40.000 y 28.000 litros de capacidad.
Actualmente su estado presenta unas deficiencias muy importantes, con fisuras y grietas que se repararán además de impermeabilizar todo el interior. Primero será necesario retirar la impermeabilización existente, que no aparece en todos los parámetros, si bien es necesario limpiarlos, así como posteriormente realizar una reparación y limpieza general. La ejecución material del proyecto se ha contrata do a la empresa zamorana “Poliéster Sotelo” con un presupuesto de adjudicación de 17.586,75 euros y un plazo de ejecución de tres meses.
En el interior del depósito se deberán reparar las fisuras que se aprecien y la impermeabilización se ha previsto mediante la aplicación de poliéster reforzado con fibra de vidrio y terminación top-coat color blanco especial alimentaria, previo su secado y preparación de la superficie, con parte proporcional de andamiaje y elementos auxiliares necesarios, cumpliendo en todo momento el acabado para usos alimentario y lo prescrito por la legislación vigente.
Asimismo, se incluyen partidas alzadas para gestión de residuos de obra y para obras imprevistas.
Villarino Manzanas tiene la captación de agua en una acuífero en el valle de “Melendro” de la Sierra de la Culebra, hacia Linarejos, a unos 7 kilómetros del pueblo. En el municipio actualmente se ultima la construcción y puesta en marcha de las estaciones depuradoras de agua potable (ETAP) para la eliminación de los contenidos de hierro y manganeso en las localidades de Moldones (120.805 euros), donde en 2018 se perforó un nuevo pozo de sondo en “Las Peñicas” y Figueruela de Arriba (100.168 euros), adjudicadas ambas a la empresa “North Line” de Villaviciosa de Odón (Madrid). También se ha actuado en la mejora del abastecimiento en Flechas.
