Las bodegas de la Denominación de Origen Tierra del Vino han sufrido los efectos originados por la pandemia en su balance de resultados correspondiente a 2020.
Los largos periodos de cierre en los establecimientos de hostelería, el principal canal de distribución de los vinos de esta demarcación, han supuesto una reducción de los litros de vino certificado y de tirillas emitidas cercana al 40% durante el año pasado. Sin embargo, esta notable caída se ha visto compensada con el aumento registrado entre 2018 y 2019, lo que permite que “la reducción real tanto de vino certificado como de tirillas emitidas respecto a un año habitual pueda estar alrededor del 20%, puesto que se deber tener en cuenta que en el año 2019 tuvimos un incremento, respecto al año 2018, del 36,51% en litros de vino certificado y del 35,99% en tirillas emitidas”, según apunta el gerente de la DO, José Manuel Braña.
En concreto, la DO emitió 145.400 tirillas a lo largo de 2020, un 38,34% menos que en 2019, cuando la cifra se situó en 235.800 unidades de este tipo de contraetiquetas, que acreditan la calidad y seguimiento de un producto. Durante el año pasado, el vino certificado ascendió a 108.490 litros, frente a los 176.850 alcanzados en 2019, lo que también supone una reducción del 38,65%.
Repercusión de las restricciones en la última vendimia
Estas cifras demuestras que la reducción del vino comercializado con Denominación de Origen “Tierra del Vino de Zamora” en 2020 ha sido muy similar al descenso del volumen del vino certificado con DO “puesto que en las bodegas había poco vino almacenado de cosechas anteriores y durante el año 2020 las bodegas han sido muy prudentes en las solicitudes de la calificación de vino y entrega de tirillas, ajustando las mismas a aquellas cantidades de vino que pudieran comercializar”, puntualiza el responsable de la DO. El reducido tamaño medio de las bodegas determina que, tradicionalmente, los vinos producidos dentro de esta demarcación estén más presentes en el canal de hostelería que en el canal de alimentación.
Las restricciones originadas por la pandemia también se han dejado notar en la última campaña de vendimia de la DO, con una reducción de la contratación de vendimiadores que a su vez supuso una ralentización de la entrada de uva en determinadas bodegas de la Denominación de Origen. En cuanto a la cantidad de la uva, el volumen recolectado en la vendimia de 2020 ascendió a 717.582,05 kilogramos, un 15,04% más que el año anterior.
Presencia en el mercado internacional
A pesar de las limitaciones impuestas por la crisis sanitaria, la DO ha mantenido su presencia en el mercado internacional a lo largo del año pasado y ha realizado exportaciones a países tan dispares como Estados Unidos, China, Polonia, Suecia, Suiza o Rusia. Estas operaciones han sufrido un inevitable descenso como consecuencia de la pandemia, en especial las dirigidas al mercado asiático, según señalan fuentes de la DO.
A pesar de la complicada situación económica creada por la pandemia, la DO también ha dado la bienvenida a tres nuevas bodegas que se han inscrito en la demarcación a lo largo de este año. Se trata de la Bodega Castillo del Buen Amor, en Villanueva de Cañedo (Salamanca); Bodegas y Viñedos Sotero Pintado, en Benegiles, y Bodega Dominio de Sexmil, en Cabañas de Sayago.
