Las lluvias del mes de febrero, la subida del nivel del Lago de Sanabria y la capa freática, unido al acelerado deshielo de la nieve caída en la Sierra Segundera han dejado una imagen nada idílica del Lago de Sanabria. Los colectores de la playa del monte de UP Folgoso han soltado agua directa a la masa lacustre, incluidas las aguas pluviales que absorben los colectores. La menor presión turística y de residentes en esta zona del Parque Natural alivia el volumen de aguas negras de vertido directo, una vez más. La tregua en las precipitaciones de estos últimos días de febrero también ha ayudado, de forma natural, a hacer descender el río caudaloso que circula por los colectores. Los problemas estructurales en la ejecución del proyecto de Saneamiento Integral del Lago persisten 27 años después de su construcción.