El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, tachó hoy de “reprochable” y “deplorable” la actitud de la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en relación al cambio del estatutos legal del lobo ibérico al norte del río Duero.

Fernández Mañueco aseguró en una comparecencia por videoconferencia que el Gobierno utiliza “sectariamente sus ideales” para confrontar con las comunidades, pero recalcó que esa no es la “estrategia” de la Junta, por lo que apeló al “entendimiento” y el “diálogo” para llegar a un acuerdo sobre la gestión del lobo.

En ese sentido, el jefe del Ejecutivo autonómico destacó que Castilla y León junto a Galicia, Asturias y Cantabria, ha remitido una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para buscar el entendimiento y una posición de consenso, frente al conflicto, pero recalcó que es tan legítimo defender los intereses de la Comunidad y de los ganaderos, que cualquier otro.

Asimismo, Fernández Mañueco defendió que la Junta tiene una postura que no ha variado y que comparte con otras comunidades del noroeste que aglutinan a la mayoría de la población lobera de España. Por ello rechazó la política de “imposición” de la ministra Teresa Ribera, que recordó lo llamó para indicarle que adoptarían una decisión con las comunidades, que criticó se han encontrado con una respuesta “unilateral” y sin comunicación.

También aprovechó para criticar a los dirigentes del PSOE de Castilla y León porque aseguró hay fuerzas políticas que están preocupadas por generar “conflicto”, “barullo” y “ruido”, mientras de la Junta buscan el entendimiento y el diálogo y, como ejemplo, puso las “innumerables” conversaciones del consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, con sus homólogos de otras comunidades y otros afectados.