La prórroga del cierre de la frontera con Portugal hasta el 16 de marzo ha colmado la paciencia de los representantes municipales, empresarios y trabajadores de la zona de Fermoselle, Bemposta y Mogadouro que mañana protagonizan un acto de protesta en el paso frontetizo de la presa. Representantes de los ayuntamientos y cámaras municipales del territorio fronterizo, además de trabajadores autónomos secundan una concentración, mañana a las 12.00 horas (hora española), para exigir "la inmediata apertura" del paso fronterizo, cerrado desde el pasado 29 de enero como consecuencia del recrudecimiento de la pandemia del COVID 19.

A diferencia del paso de Miranda do Douro, donde existe un cierre parcial sometido a un horario, en el caso de Bemposta la frontera se ha cerrado a cal y canto, con una viga de hormigón atravesando la vía y una alambrada que impide la circulación por este punto. El malestar generado por este cierre total se ha visto acrecentado cuando se ha conocido la ordel del Boletín Oficial del Estado de hoy, según la cual los controles en la frontera entre España y Portugal, vigentes desde el 31 de enero, se prorrogan hasta el 16 de marzo a la una de la madrugada por la incidencia de la pandemia de la covid-19, y se mantendrán las mismas restricciones de paso que estaban vigentes.

José Manuel Pilo, alcalde de Fermoselle, asegura que el cierre de paso por Bemposta, la comunicación natural de la villa de los Arribes con Portugal supone "un quebranto económico para los dos lados de la frontera que no podemos seguir soportanto. No pueden pasar ni mercancías ni trabajadores de ambos lados que a diario se mueven a sus trabajos y están obligados a hacer grandes rodeos". Junto al regidor fermosellano estarán en la concentración representantes municipales lusos y empresarios. "No se trata de una concentración multitudinaria, estaremos una serie de representantes reinvidicando la apertura de la frontera en nombre de todos los afectados. Tenemos que cumplir las normas anti-COVID" precisa Pilo.