El Plan de Empleo Forestal de Zamora ha dado trabajo a más de 208 desempleados desde su puesta en marcha en el año 2016, según destacaba ayer la delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Clara San Damián, que hacía balance de este plan junto al gerente del Ecyl, Efrén Fernández, y el jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente, Manuel Moreno. La Consejería de Empleo ha aportado más de dos millones de euros a lo largo de las cinco ediciones del plan, que es ejecutado por la Diputación de Zamora.

Clara San Damián manifestó que “este Plan responde a las actuaciones de las consejerías de Empleo y de Fomento y Medio Ambiente con las nueve diputaciones provinciales, por tanto con la de Zamora, en un ejemplo de coordinación administrativa, con el objetivo de desarrollar económicamente el territorio, dinamizar el sector forestal y prevenir incendios forestales; y desde el punto de vista del empleo, mejorar los niveles de ocupación en cantidad y calidad y apoyar a colectivos prioritarios: jóvenes, mayores de 45 años y parados de larga duración”.

La Consejería de Empleo financia con 10.000 euros cada contrato de seis meses a tiempo completo, un 65 % del Plan, tramita las subvenciones y supervisa las contrataciones, mientras que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente se responsabiliza de coordinar las actuaciones, apoyar la programación sobre el territorio y aportar formación en trabajos forestales y evaluar el programa.

Por su parte, las diputaciones aportan el 35 % de los fondos restantes del Plan, seleccionan y contratan a los trabajadores, aportan equipos, herramientas, materiales y vehículos, coordinan a los ayuntamientos, programan actuaciones, dirigen los trabajos y realizan el seguimiento y la evaluación de los mismos.

Los beneficiarios son desempleados inscritos como demandantes de empleo en las oficinas del Servicio Público de Empleo de Castilla y León (ECYL). Los contratos son temporales, con una duración mínima de 180 días a jornada completa.

A través de este plan, la Junta de Castilla y León destinó en 2020 a la provincia de Zamora más de 400.000 euros en una subvención directa a la Diputación con el objeto de paliar la situación de desempleo de los trabajadores que participan en los trabajos, que fueron un total de 45 desempleados.

Los trabajadores contratados realizan obras y servicios ligados a programas específicos de trabajos de prevención de incendios en el interfaz urbano-forestal y otros trabajos forestales y de mejora medioambiental.

Dichos trabajos, que se ejecutan a petición de los ayuntamientos, se refieren concretamente a prevención de incendios en el interfaz urbano-forestal, (mediante la eliminación del matorral, poda del arbolado y trituración o extracción de restos); apertura de fajas auxiliares contra incendios en carreteras y caminos rurales; tratamientos selvícolas de masas arboladas en parcelas de montes públicos próximas a los pueblos; adecuación de áreas recreativas y riberas; apertura y mantenimiento de sendas y trabajos diversos de colocación de señales, reposición de mojones, limpieza de pasos de agua y despeje de cunetas, plantaciones o reposiciones de marras.

Desde la Junta de Castilla y León destacan la importancia de estos trabajos impulsados por el Gobierno Autonómico y la Diputación de Zamora orientados a la prevención de incendios forestales. Las labores de limpieza en zonas periurbanas y de transición a la zona forestal, así como otras labores selvícolas y de desbroce en entornos de los pueblos, contribuyen a la prevención de incendios forestales en la Comunidad. En la misma línea, se desarrollan las labores de mantenimiento de sendas, adecuación de riberas, mantenimiento de áreas recreativas y otras tareas como la colocación de señales o la reparación de pequeñas infraestructuras forestales.

El papel de estas cuadrillas en la lucha contra incendios forestales es muy importante en labores de prevención, reduciendo la carga de combustible en las áreas del interfaz urbano forestal y en la apertura de fajas auxiliares contra incendios.

Matorral junto a un pinar en La Carballeda. | A. Saavedra

COAG PIDE QUE SE ACTÚE EN TODAS LAS PARCELAS, AUNQUE LOS PROPIETARIOS NO ESTÉN LOCALIZADOS

La organización agraria COAG reclama que se acelere la ejecución del plan de trabajos forestales y que se aplique para la limpieza perimetral en los pueblos. El representante de la organización agraria en Sanabria y Carballeda, José Manuel Soto, señaló que con la situación actual “hay que contratar trabajadores para que hagan limpieza de matorral, podas y mantenimiento de cortafuegos y caminos”. Soto valoraba positivamente el plan, pero pide que se incluya todas las fincas del perímetro de los pueblos cuyos propietarios están ilocalizados.

Los trabajos relacionados con el empleo verde “son un filón de empleo para estos pueblos- Si hay cinco trabajadores y se necesitan 10 que se contraten para hacer estos trabajos de prevención”. Los tiempos son fundamentales en la prevención, “no se puede esperar para empezar en el mes de junio, cuando este es el momento de empezar a prevenir, sino a esperar en verano a ver los incendios”.

El área de obras de la Sección de Parque Móvil y Medio Ambiente de la Diputación ha convocado el plazo para presentar solicitudes dentro COVEL 2020 - Plan Forestal 2021, para la contratación temporal de personas desempleadas para la prevención de incendios en los territorios de transición urbano-forestal de los municipios. El plazo para que los ayuntamientos presenten solicitudes finalizará el 22 de febrero.

José Manuel Soto pidió que el plan se ponga en marcha cuanto antes para comenzar los trabajos de limpieza con anticipación ,“lo deseable es que comiencen las limpiezas en los pueblos el mes que viene y no retrasar la contratación para el mes de mayo”.

Una situación que preocupa a COAG es que no se pueda efectuar la limpieza de aquellas fincas donde no se localice al propietario “habrá que implementar algún tipo de medida que, en caso de no localizar al dueño, se pueda realizar la limpieza que no ocasiona ningún daño a las fincas y sí mucho beneficio”. Ponía como ejemplo alguna finca pegada a una vivienda del casco urbano “que por no localizar al dueño quede sin limpiar, y de declararse un fuego, ya tenemos el problema dentro”. El objetivo es romper la continuidad, tanto horizontal como vertical, del combustible vegetal en dichas áreas, de manera que la propagación del fuego se frene y pierda intensidad alrededor de los núcleos habitados. Las labores silvícolas incluirán el desbroce de matorral, clareo y poda del arbolado existente, hasta una altura aproximada de 2 metros.