El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, creará un grupo de trabajo en materia de precios en el que “dirimir los aspectos que importan desde el punto de vista de la cadena alimentaria” si no fructifica un pacto en la materia. Durante su participación en Los Desayunos de Ical, Carnero trasladó este deseo aunque confió en que pueda irse más allá y alcanzar un gran pacto que permita establecer “un marco estable” entre los miembros que forman parte de la cadena alimentaria, aunque reconoció que actualmente hay “alguna dificultad” para avanzar en este aspecto por parte de las organizaciones profesionales agrarias (opas).

Carnero confirmó que las organizaciones agrarias están dispuestas a la constitución de ese grupo pero la intención de la Junta es “avanzar” más allá para firmar una declaración conjunta entre Opas, distribución e industria agroalimentaria que dé “respaldo” a la actuación de este órgano. A juicio de Carnero, ese grupo de trabajo “solo va a producir beneficios” porque se pondrá de manifiesto una comunicación entre la distribución, la industria agroalimentaria y los propios agricultores a través de las opas.

El inicio de este procedimiento tuvo lugar hace ahora un año, momento en el que daban comienzo las movilizaciones del sector, que entre otros aspectos reclamaba unos precios dignos. “Entonces las opas querían mantener una postura de fuerza” tras lo que siguió la pandemia, que dio paso a una fase “muy oscura”. En este tiempo, Carnero confirmó que se ha avanzado y se cuenta con el compromiso de las organizaciones de “avanzar”.

Eslabón más débil

El objetivo último es “fortalecer” al eslabón más débil y que desequilibra la cadena, que es el agricultor y el ganadero. “Si lo fortalecemos, habremos conseguido un marco estable y equilibrado en la cadena”, añadió Carnero, quien recordó que además de en este pacto se va a trabajar en la regulación de los mercados de cercanía y en las lonjas de referencia. Hasta ahora, en estas materias se está actuando “de forma interna” para que estos decretos puedan ver la luz “lo más próximamente”.

En el caso del decreto de los mercados de cercanía, el consejero explicó que se está aún en “una fase muy inicial” para facilitar que los productos agroalimentarios “puedan tener esa cercanía en la venta” entre agricultor y ganadero, y consumidor, salvaguardando “en todo momento” la seguridad alimentaria, y para lo que se están teniendo en cuenta modelos como el gallego o el recientemente implantado en Castilla-La Mancha.