Crece la preocupación en los pueblos fronterizos con portugal de Sayago, Aliste y Sanabria ante el incremento de casos de COVID-19 en los últimos días en el Distrito de Braganza, que integra a los concelhos rayanos de Braganza, Vimioso, Miranda y Mogadouro.
Mientras en la provincia de Zamora preocupa la tasa de 285 casos nuevos en 14 días por cada 100.000 habitantes, en la vecina Región Norte de Portugal en los últimos 14 días hasta doce municipios portugueses superaron la incidencia de los 960 casos nuevos, según un documento de la Administración Regional de Salud del Norte (ARS-N). De ellos tres pertenecen al Distrito de Braganza: Macedo de Cavaleiros, Miranda do Douro y Mogadouro. La situación más preocupante y a tener en cuenta se vive en el concelho de Miranda que lidera la tasa de incidencia con 2.620,8 casos por cada 100.000 habitantes.
Los vecinos de las zonas fronterizas de Zamora temen que el cierre perimetral de Castilla y León hasta el día 9 de mayo no sea efectivo para frenar la expansión del coronavirus en la Comunidad si no se extreman los controles en todos los pasos fronterizos con Portugal, por donde hay un trasiego diario de vehículos que entran y salen.
El elevado número de pasos fronterizos hace muy difícil que haya controles permanentes de la Guardia Nacional Republicana y de la Policía Nacional de Fronteras. Solamente en la comarca de Aliste hay ocho carreteras que cruzan la Raya por Castro de Alcañices a Paradela, Brandilanes a Ifanez, Moveros a Constantim, Alcañices a Vimioso, Villarino tras la Sierra a Vale de Frades, San Martín del Pedroso a Quintanilla (Nacional 122 y Autopista Trasmontana), Villarino de Manzanas a Petisqueira y Riomanzanas a Guadramil. A lo que habría que sumar los accesos viarios por caminos de tierra.
Ante la llega de la tercera ola del COVID-19 la Zona Básica de Salud de Aliste se mantiene con un índice de casos bajo y así se espera seguir, por lo cual, los abuelos y abuelas que integran el sector más alto de la población y a la vez el más vulnerable esperan que el resto de la población se comporte con sensatez y cumpla todas las medidas de higiene y distanciamiento social hasta que la pandemia acabe: “Aliste, esta comarca y nuestros pueblos, ahora mismo es un paraíso para vivir y mantenernos libres del COVID-19 y solo de nosotros va a depender que así siga siendo. Para ello debemos de seguir extremando las precauciones, utilizando siempre la mascarilla y olvidándonos de momento de las reuniones o tertulias al sol de todos los vecinos de un barrio, porque si uno cae caemos todos”, aseveran los ancianos.
El lunes llegaron las primeras vacunas contra el virus a Aliste y la mayoría de los alistanos ya están listos para ser vacunados “cuanto antes” –aunque también los hay reticentes a la vacuna– en un anhelo de volver pronto a la normalidad. “Se ha abierto una puerta hacia la esperanza, pero no debemos bajar la guardia ni olvidar que muchos alistanos y alistanas se nos han ido a causa de esta maldita pandemia.” –señala un nonagenario– “Solo habiéndolo vivido se sabe lo que es. A mi el Convid 19 me dejó viudo y es la peor experiencia de mi vida, aparte de perder a mi mujer, fue no poder estar junto a ella en los últimos momentos, sin siquiera velarala, llorarla y darle un beso de despedida, no solo perdí a mi mujer, perdí las ganas de vivir”.
Uno de los grandes logros en Aliste es que en dos residencias de la tercera edad alistanas, “Virgen de la Salud” de Alcañices y “San Salvador” en Rabanales, no han tenido hasta ahora ni un solo caso de coronavirus y sus residentes y trabajadores son los primeros vacunados.
PORTUGAL ADAPTA UN BIOSENSOR DEL ADN DEL VINO PARA LA DETECCIóN RÁPIDA DEL CORONAVIRUS
La Universidad de Tras os Montes y Alto Douro (UTAD), con sede en la ciudad portuguesa de Vila Real, trabaja ya en una fase muy avanzada para la creación de un biosensor que facilitaría la detección rápida del virus SARS-Cov-2 a través de una tecnología hasta ahora utilizada para identificar el ADN de las distintas variedades del vino.
La Fundación “Manuel Antonio da Mota” integrada en la iniciativa “Portugal gana al COVID-19” ha sido una de las primeras entidades en apoyar el proyecto con una mención de se de 5.000 euros. Los rayanos des muestran orgullosos por los trabajos de la UTAD, una de las universidades más prestigiosas del Portugal que acoge a alumnos y profesores de de Aliste y Tras Os Montes.
Se trata de una tecnología cuya patente internacional ha sido registrada recientemente por la UTAD, desarrollada en el ámbito de WineeBioCode y de la plataforma Innovine & Win.
Estamos, así lo reconocen orgullosos los portugueses, ante un prototipo único en el mundo que ya está en proceso de culminación que garantizaría los resultados fiables de detección del COVID-19, una vez tomadas las muestras, en solamente 20 minutos, con la ventaja de que, además de ello, para la realización de las pruebas a los pacientes no sea necesario personal especializado. Otra de sus bondades estaría en un menor coste que las pruebas PCR (Reacción en Cadena de la Polimerosa), con lo cual estaría al alcance de todos con independencia de su economía.
“Los trabajos de autenticidad que la Universidad de Tras Os Montes y Alto Douro viene desarrollando desde hace varios años constituye un conocimiento muy valioso que ahora se puede trasferir a la situación muy preocupante en la que vivimos”, ha señalado la profesora del Departamento de Genética y Biotecnología de la UTAD y a la vez una de las científicas del proyecto. Paula Martins Lopes. Ella es quien lidera la ambiciosa iniciativa junto a Helena Gonçalves, un prestigiosos y admirado equipo científico que ve factible el uso masivo del prototipo que nacerá en la Raya de España y Portugal, paradójicamente una de las zonas más deprimidas de la Unión Europea y marcada durante muchos siglos por el olvido desde Madrid y Lisboa.
Según se expresa por parte de los expertos desde la región de Tras Os Montes y Alto Douro se trata de un biosensor magnético que de una forma rápida y muy sencilla no solamente detectaría el coronavirus a través de unas pruebas moleculares diagnósticas, mediante análisis del material genético recogido a través de hisopos, sino que a su vez también realizará pruebas serológicas que tendrían como objetivo estratificar a los pacientes sobre la evaluación de la gravedad y la inmunidad del coronavirus.
El proyecto, que ahora puede marcar un antes y un después en lo que a detección del COVID-19 respecta, fue financiado en su origen por la Fundación para la Ciencia y la Tecnología, pero su diseño estaba dirigido para identificar y autentificar vinos de la región del Douro a partir de las distintas variedades de uvas.
