Una avería en la subestación eléctrica de Cibanal dejó a parte del municipio de Fermoselle sin suministro eléctrico desde la mañana del martes, cuando llegaba el temporal Filomena.

El incidente perjudicó a negocios como las panaderías, que no pudieron terminar de cocer el pan de esa mañana, la potabilizadora de agua del propio ayuntamiento y otros servicios municipales como el velatorio, que se quedó sin calefacción. El domingo se solucionó definitivamente.

La nieve no llegó a esta parte de la provincia hasta la tarde del sábado, y el ayuntamiento activó un dispositivo para tratar de paliar sus efectos sobre la población en la medida de lo posible, según explica el alcalde, José Manuel Pilo.

El Gobierno municipal publicó un bando con un número de teléfono al que pudieran recurrir todos los vecinos que lo necesitaran, en especial aquellas personas de avanzada edad que necesitaran víveres, medicamentos o incluso acercarse al centro médico.

Además, desde el fin de semana se han esparcido más de 2.500 kilogramos de sal por las distintas calles y plazas de Fermoselle. Muchos vecinos colaboraron junto a los servicios municipales en la retirada de la nieve. También la Cámara Municipal de Mogadouro, del otro lado de la frontera hispanolusa, que cedió a Fermoselle dos sacas de sal a Fermoselle, de 1.000 kilos cada una.