El último mapa de infraestructuras de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León señala cuáles son las zonas prioritarias para actuar en concentraciones parcelarias. En la comarca natural de Aliste, Tábara y Alba hay 13 pueblos que aún no tienen hecha la concentración y que, por distintos motivos, tampoco están incluidos en la categoría de prioritarios en este mapa. Se trata de Mahíde, Boya, Figueruela de Abajo, San Cristóbal de Aliste, San Juan del Rebollar, Cabañas de Aliste, Gallegos del Río, San Vicente de la Cabeza, San Vitero, Villarino de Cebal, Navianos de Alba, Vegalatrave y Marquiz de Alba.
La baja densidad agroganadera es el motivo de que otras localidades pasen por delante, en algunos de estos 13 pueblos apenas quedan vecinos y los profesionales del campo están extinguidos. El hecho de no aparecer en la lista de actuaciones prioritarias no significa que queden exlcluidas, sino que a corto plazo no se contemplarán esas concentraciones parcelarias.
Mejor suerte tendrán las zonas de Villarino Tras la Sierra, Vivinera, Rábano de Aliste, Ufones, Nuez, Alcañices y Tola donde se está realizando el procedimiento privado de concentración parcelaria, encontrándose en la actualidad la Consejería de Agricultura en contacto con los promotores (ayuntamientos y propietarios) que ya han presentado los Estudios Técnicos Previos a efectos de informarles acerca de los tramites y actuaciones a realizar de conformidad con la legislación vigente.
La Consejería de Agricultura viene confeccionando a lo largo de este peculiar año 2020 los títulos de propiedad de las concentraciones parcelarias de Sarracín de Aliste, Losacio, Ceadea, Riofrío de Aliste, Matellanes, Viñas, Sesnández de Tábara, Cerezal de Aliste, Villaflor y San Martín de Tábara. Dichas concentraciones pueden considerarse prácticamente finalizadas a falta únicamente de la entrega de los títulos una vez confeccionados, protocolizados ante Notaría e inscritos en el Registro de la Propiedad.
La localidad de Rabanales de Aliste el proceso continúa a buen ritmo tras su declaración de utilidad pública el 3 de febrero de 2020, la cual afectará a un total de 1.810 hectáreas que están distribuidas en 12.654 parcelas de alrededor de 526 propietarios. Sus coste rondaría los 684.701,23 euros y habrá de construirse una nueva red de caminos de 42,3 kilómetros.
En 2021, la Junta de Castilla y León abordará la concentración parcelaria de Ferreruela de Tábara, a la que destinará una inversión de 346.000 euros la próxima anualidad. Este proceso se ha retrasado ya 29 años, en parte, por los problemas suscitados a la hora desde conseguir saber cuáles eran los verdaderos dueños de algunas fincas, lo que llevó a numerosos recursos entre los vecinos.
El coste total de las actuaciones en Ferreruela será 1,4 millones de euros por lo cual las actuaciones se habrán de realizar en varias fases, para una superficie afectada de 3.500 hectáreas. Desde el 12 de julio de 2017 se encuentra en fase de acuerdo.
La concentración parcelaria local de Ferreruela de Tábara fue solicitada con carácter oficial el día 26 de julio d 1991 mediante la firma de la mayoría de los propietarios de la zona, aunque el Estudio Técnico Previo no se realizó hasta marzo de 2004. Su declaración de utilidad pública y urgente ejecución llegó el 12 de mayo de 2005. La Junta de Trabajo fue elegida en asamblea de agricultores legalmente constituida el 31 de julio de 2003, pero luego fue elegida otra el 19 de agosto de 2006. La Comisión Local de la Concentración Parcelaria quedó constituida el día 7 de noviembre de 2008, publicándose ese mismo día las bases provisionales. Hubo de abrirse una nueva encuesta a bases provisionales el 4 de agosto de 2009.
Uno de los grandes problemas, según los propios vecinos, surgió cuando un buen número de parcelas eran reclamadas por varias familias. Se dieron casos en que una misma parcela era reclamada por una persona que presuntamente era su antigua propietaria y la había vendido y otra que se la habría comprado y en teoría era la nueva dueña. Entre unas cosas y otras se fueron retrasando los trabajos y las bases definitivas de la concentración no fueron aprobadas hasta el día 28 de enero de 2011, pero los acontecimientos no permitieron que fueran declaradas firmes hasta cinco años después, el día 21 de diciembre de 2016.
En es período el jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta aprobó el proyecto con fecha de 4 de julio de 2013, el cual fue sometido a encuesta en el plazo legalmente establecido. No obstante, hubo de modificarse el proyecto y volver a someterlo a encuesta por segunda vez a lo largo del mes de octubre del año 2015.
Por su parte la Corporación Municipal del Ayuntamiento de Ferreruela, presidido por el alcalde Ángel Román Rodríguez, acordó en sesión ordinaria, por unanimidad de los asistentes el 31 de julio de 2008 la inclusión de las fincas municipales en la concentración parcelaria.
En el mes mayo de 2017 se culminó el proyecto redactado por los ingenieros Miguel Ángel Hernández Gómez y Antonio Almeida Garretas, con el visto bueno de la jefa del Servicio Territorial de Agricultura Rosa María Alonso Fernández, y en su final se preveía que “la toma de posesión de las nuevas fincas de reemplazo se podrá dar, teniendo en cuenta el período de exposición del acuerdo, así como la ejecución del replanto, en el año 2018”. Tampoco pudo ser.
La Junta invertirá 346.000 euros en 2021 para el proceso de Ferreruela
Durante el período de encuesta del proyecto modificado “se recibieron numerosas alegaciones referidas a la adjudicación de las nuevas parcelas, siendo atendidas aquellas alegaciones que técnicamente se encontraron justificadas”. El día 20 de marzo de 2017 por parte de Dirección General de Producción Agropecuaria e Infraestructuras Agrarias hubo una resolución por la que se modificaban las bases definitivas como consecuencia de la ejecución y puesta en marcha de hasta tres proyectos de parques eólicos en la zona afectada.
Finalmente la concentración ha afectado a un total de 11.332 parcelas (con alrededor de 3.500 hectáreas) de 427 propietarios que se verán reducidas tras la concentración a sólo 1.388 fincas de reemplazo. Cada propietario tenía una media de 26,54 parcelas que pasarán a 3,30. El tamaño medio de los minifundios era de 31 áreas y 21 centiáreas, y se pasará ahora a unas fincas de 2 hectáreas, 50 áreas y 23 centiáreas de media.
El Boletín Oficial de las Cortes de Castilla y León ofrecía el pasado verano un informe del Consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero García, donde se afirmaba que “respecto a la zona de Ferreruela de Tábara se está llevando a cabo la resolución de los recursos interpuestos al acuerdo de concentración de la zona de referencia. Con posterioridad a este trámite se llevará a cabo el amojonamiento, así como la toma de posesión de las fincas de remplazo. Una vez firme el acuerdo, se continuará con la confección y entrega de los títulos de propiedad”.
