La conexión a Internet de alta velocidad es una de las demandas prioritarias para los Ayuntamientos, conscientes de que este servicio es una condición necesaria para la fijación de población. Por ello los municipios de Cañizal, Vallesa y Castrillo han hecho causa común para no perder el tren del plan de extensión de banda ancha.

La exclusión de estos tres municipios de la comarca de La Guareña del despliegue de fibra óptica ha llevado a que hayan sumado fuerzas presentando una memoria a la Junta para que intermedie ante las operadoras de telecomunicaciones y se consiga la instalación.

“Nos han dejado fuera, a pesar de que somos poblaciones con un tejido económico, estamos al lado de la autovía y ahora con la pandemia hemos visto cómo hay personas que se han quedado a teletrabajar pero si no se les garantiza una buena conectividad no van a poder permanecer en los pueblos” argumenta Rubén Sierra, alcalde de Cañizal. En el caso de este municipio, cuenta con 455 habitantes y más de una decena de empresas.

El objetivo de la agenda España Digital 2025 se propone alcanzar el 100% de cobertura poblacional de banda ancha a velocidad de al menos 100 Mbps. El plan pretende extender la banda ancha a todas las zonas rurales para contribuir también a cerrar la brecha digital, hacer frente al reto demográfico y construir una sociedad y economía más inclusiva y sostenible.

Espacios wifi

Por otro lado el municipio de Cañizal ya cuenta con espacios públicos que disponen de wifi para que los vecinos puedan conectarse a Internet sin tener que hacer uso de sus datos. El Ayuntamiento consiguió una subvención de 15.000 euros para la instalación de la red, aunque como ha precisado el alcalde, Rubén Sierra, “no ha llegado para cubrir todo el pueblo”. El servicio se extiende así a edificios municipales y espacios públicos.

El proyecto permite hacer uso de la wifi en el Ayuntamiento, el salón, el antiguo cuartel y espacios de uso público como el parque infantil o las piscinas, la zona del colegio, la Plaza del Ayuntamiento, el entorno de la iglesia o el frontón, que suele ser lugar de reunión especialmente de los jóvenes durante las vacaciones o el verano.

El servicio de wifi público lleva una semana funcionando a disposición de todos los vecinos. “Para su acceso lo único que deberéis de hacer es aceptar las condiciones después de buscar la red” precisa el alcalde Rubén Sierra en la información a los vecinos.

El programa está financiado por la Unión Europea y permite el acceso gratuito a Internet desde espacios públicos; “no está pensada para funcionar dentro de las casas” precisa el alcalde de Cañizal.