Las calles de Guarrate viven ya el ambiente navideño con una iluminación especial que pretende compensar la ausencia de los tradicionales festejos públicos, este año suspendidos debido a la pandemia del COVID 19.
Trece puntos de luz a lo largo de las calles principales del pueblo y un árbol en la Plaza iluminan este pueblo de la comarca de La Guareña hasta el final de las fiestas navideñas. La iniciativa del Ayuntamiento ha contado con la colaboración desinteresada de un grupo de jóvenes voluntarios, encargados del montaje de las luces. “Es un año complicado, no vamos a poder hacer la Cabalgata ni celebrar las fiestas en condiciones normales, por eso hemos querido dar un poco de alegría al pueblo, especialmente pensando en los niños” explica Rafael Sánchez Riesco, alcalde de Guarrate.
La recién estrenada iluminación ha permitido ver a vecinos recorriendo un pueblo ya imbuido por el espíritu de la Navidad. Una iniciativa que cuenta además con el aliciente de la cooperación, en este caso de la mano de una decena de jóvenes, con el alcalde a la cabeza, que se han puesto manos a la obra para que Guarrate brille más que nunca en una Navidad marcada por la pandemia. Parte de la iluminación es propiedad del Ayuntamiento y otros elementos han sido alquilados. Actos como la tradicional Cabalgata es muy probable que se suspendan para evitar contactos, tal y como están recomendando las autoridades sanitarias.
