Vegalatrave culmina la restauración del puente de piedra construido en 1934

Vegalatrave culmina la restauración del puente de piedra construido en 1934

Vegalatrave culminaba ayer lunes la recuperación de Puente de la Vega sobre el río Aliste que, tras ochenta y dos años prestando servicio, corría serio peligro de venirse abajo a causa de la grave erosión producida por las aguas y dejar incomunicado al pueblo con Samir de los Caños, sobre el pasa la carretera ZA-2421, y la iglesia de San Lorenzo Mártir con el camposanto ubicado en “La Era”.

Aparte de su importancia y prestación de servicios se trata del puente de arquitectura tradicional de piedra más importante y grande que ha sobrevivido a la modernidad en los 102 pueblos de la comarca de Aliste, Tábara y Alba. Cuenta con una longitud de 77 metros y 56 centímetros, y aguanta sobre él una calzada, ya moderna, de 5 metros de ancho para calzada y dos aceras.

El río Aliste parte el término de Vegalatrave en dos y ello ha supuesto que históricamente, en tiempos de grandes avenidas, incomunicará la zona del casco urbano a su izquierda con la campestre de su derecha. El problema creció con la construcción en 1929 del “Salto de Ricobayo” ya que las aguas del embalse, al alcanzar su cota máxima de llenado, retrocede ocupando el antigua cauce del río Aliste hasta Vegalatrave de Alba. Por este motivo la Sociedad Hispano Portuguesa de Transporte Eléctricos “Saltos del Duero”, luego Iberduero y ahora Iberdrola, construyó el viaducto de Vegalatrave.

La Corporación de Vegalatrave, presidida por la alcaldesa María Isabel Alvarez, con un presupuesto limitado, solicitó a la Diputación de Zamora ayuda dado que el puente corría serio peligro de venirse abajo de darse un invierno de crecidas. Los técnicos corroboraron los temores de los ediles y los vecinos.Hay que tener en cuenta que hasta la “Vega la Trave” llega ya el río Aliste con su máximo caudal tras haber recibido las aguas de los ríos Frío, Espinoso, Cebal y Mena.

La Diputación de Zamora, dentro del Plan de Mantenimiento de carreteras, ha actuado con urgencia sobre un puente de vigas de hormigón asentadas sobre cuatro pilares centrales con tajamares y un arco en cada extremo de mampostería formada por lajas de pizarra y cuarcitas recibidas con mortero. El problema estaba en que la corriente las había descalzado y algunas pilas ya estaban prácticamente en el aire.

La solución ha pasado por la demolición y retirada del hormigón de la solera utilizado en alguna restauración parcial hace ya años y su llevado a una planta de tratamiento de residuos. Aprovechando que el río estaba seco se echó una nueva solera.

La Diputación de Zamora ha construido una nueva solera de hormigón, repartida desde el eje del viaducto, 5,50 metros aguas arriba y 5,50 metros aguas abajo, lo cual evitará nuevas erosiones, pues la solera ha sido armada con una malla metálica electrosoldada de acero. Aunque las obras se comenzaron con el río seco la llegada de las lluvias y del río Aliste complicó la situación por lo cual fue necesario hacer desvío temporales del agua para poder terminar las obras de restauración.

María Isabel Alvarez Genicio, alcaldesa de Vegalatrave, asevera que “el puente sobre el río Aliste es vital para nuestro pueblo pues si sube el el embalse las aguas retroceden hacia el término de Domez de Alba y nosotros al otro lado tenemos el cementerio, además de pasar sobre el viaducto la carretera hacia Samir de los Caños. El puente estaba ya muy descalzado y corría peligro de venirse abajo. Ahora ha quedado muy bien y los trabajos realizados garantizan su futuro a corto, medio y largo plazo, cosa que agradecemos a la Diputación de Zamora pues nosotros carecíamos de fondos propios para realizar tan necesarias obras”.

EL PEREGRINO BERARDO DE ALDRETE NARRó LAS PENURIAS VIARIAS

Satisfacción también entre los vecinos. “La vega del río Aliste da nombre al pueblo y el puente es, junto a la iglesia de San Lorenzo Mártir, emblema arquitectónico para el pueblo. Necesitamos tener un puente seguro como ha quedado ahora pues para cruzar el río solo existe como alternativa, pero solo cuando el río viene bajo y no hay agua embalsada, unos pontones (hilera de piedras) para pasara andando). Ha sido una buena obra y estamos satisfechos” expresan.

El pueblo ha visto mejorada este año también la travesía urbana dentro de la nueva capa de rodadura con microasfalto que ha realizado la Diputación Provincial de Zamora, desde Muga de Alba hasta Bercianos de Aliste, por Losacino, Vegalatrave, Domez de Alba, Gallegos del Río y Valer de Aliste.

Los problemas de comunicaciones viarias entre Alba y Aliste viene ya al menos 408 años, en que muchos de los pueblos estaban en sus inicios. En la histórica catedral de Granada, muy lejos de tierras albarinas y alistanas, se conserva un manuscrito del año 1612 de un peregrino anónimo de principios del siglo XVII que los expertos creen que podría tratarse del canónigo Bernardo José de Aldrete, de Córdoba, cuando desde su Andalucía natal se dirigía a la catedral de Santiago de Compostela por los pueblos de Alba y Aliste.

Sobre la etapa décimo séptima, de alrededor de 48 kilómetros de Zamora a Valer, por Carbajales de Alba y Vegalatrave, el manuscrito señala el día 17 de febrero de 1612: “Viernes. Con furor increíble de aire frigidísimo, salimos de Zamora y por no acertar bien el camino lo perdimos dos veces, y en un lugarejo salió un hombre metido en un zamarro y preguntó si estábamos desfrenados caminando todo el día. Todos los ríos, arroyos y charcos estaban helados. Fuimos al gran río Esla que viene de las montañas de León y lo asamos por barca (Manzanal del Barco). De allí llegamos a Carbajales, faltaba el vigor para tanto frío y aire. Allí nos reparamos y habiendo pasado por el pueblo de Vega la Trave, que está asentado a la ribera de un río (Aliste) y estaba en todas partes helado y ya muy tarde llegamos a Valer, ruin lugar entre peñas, mala posada y peor abrigo y ningunas camas. Pasamoslo mal aquella noche con mucho frío en una caballeriza”.