Las obras del trazado de Alta Velocidad dejan damnificados a su paso, esta vez los caminos de Palacios de Sanabria. Vecinos y concejales llevan dos años reclamando el encauzamiento de las aguas que enfocan desde el drenaje longitudinal hacia los viales. Hay un dicho local que asevera que “las aguas estropean los caminos” y que siempre se cumple. “Hemos sufrido años de ruidos, de paso constante de camiones por el pueblo, los caminos del pueblo destrozados por la circulación, caminos sin reparar durante mucho tiempo y ahora las vías de servicio con esta chapuza al enfocarlastodo el agua”, censuran desde el Palacios.
El primer camino afectado es el de la carretera de Palacios a Sandín, donde la canaleta que recoge las aguas de los taludes del tren, está enfocada al vial, además de cerrar la cuneta de la carretera con la vía de servicio paralela al nuevo trazado ferroviario. Con una pequeña obra, el agua quedaría desviada hacia las cunetas de la propia carretera. Este camino vecinal, antigua carretera, unía el pueblo con el vecino Sandín, cuya continuidad quedó interrumpida por la construcción del embalse de Cernadilla. El camino sigue en uso, como tradicionalmente, y en general está en buen estado para acceder a fincas privadas y propiedades comunales.
El segundo tramo afectado es el paso Pezoucos donde las aguas se canalizan desde la cuneta a un tubo que desemboca al camino, donde lo menos costoso era alargarlo hacia la cuneta o bien al regato, como aprecia la concejala de Ahora Palacios, Irene Fernández. La edil recalca que desde hace dos años a ADIF se le ha comunicado el perjuicio a la servidumbrey la obligación desde subsanarla.
