El azote del COVID 19 no da tregua en las residencias de ancianos. El último caso es el del centro residencial de Gema del Vino, de titularidad privada, donde el 90% de los usuarios y la plantilla de trabajadoras están infectados desde que hace aproximadamente una semana surgieran los primeros casos. Según los datos recabados por este diario, de los aproximadamente 30 usuarios que hay en la Residencia Santa Paula, siete están hospitalizados y el brote ha tenido efectos en la residencia de Peleas de Abajo por la vinculación de alguna de las profesionales del centro de Gema del Vino que podría haber afectado a alguna persona de la plantilla del centro peleíno.
El director de la residencia de Gema del Vino confirmaba a este diario el alcance del brote en el centro, pero aseguraba que "desde el primer momento hemos tomado todas las medidas, se controla la situación de los ancianos, que en general no es mala. No hay personas graves ni hemos tenido que lamentar ningún fallecimiento (hasta el día de ayer)”.
En cuanto a la plantilla, la dirección asegura que “se están cubriendo las bajas; hoy mismo (por ayer) acabo de contratar a tres personas y hay el personal necesario para atender a los ancianos. Según han ido saliendo los positivos se han ido dando de baja” precisa. Rechaza así ciertas críticas surgidas en el sentido de que se haya obligado a ir a trabajar sabiendo que eran positivos con el argumento de que si tenían el COVID ya no se podían contagiar.
“Hicimos las PCR para ver el alcance de la epidemia y desgraciadamente hemos visto que prácticamente afectaba a todo el mundo; entró como un ciclón” expresa el responsable de Santa Paula.
La Gerencia de Servicios Sociales tiene conocimiento de esta situación y se sigue de cerca la evolución de los contagios aplicando en protocolo establecido en estos casos con inspecciones periódicas.
El director del centro de Gema asegura que han sido muy estrictos a la hora de tomar medidas para evitar al virus, con las visitas cerradas a los familiares desde marzo, cuando se declaró la pandemia. Pese a todo no se ha podido evitar el contagio en esta segunda oleada que con tanta virulencia está atacando. Desde el Ayuntamiento de Gema del Vino se ha procedido a la desinfección del exterior del centro residencial y a dotar de un contenedor para uso específico de la residencia. Estos brotes de COVID 19 se suman a otros que se han producido en residencias de la provincia como El Puente de Sanabria o Villar del Buey, que han pasado un momento muy comprometido por la epidemia con el coste de algunas vidas humanas.
