El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en el marco del desarrollo del Banco de datos de la Naturaleza, planteó a las Comunidades Autónomas el año pasado la necesidad de contar una capa cartográfica que recogiera la Red General de Vías Pecuarias del Estado. Los trabajos se realizan en paralelo con los que, dos años atrás, la Junta de Castilla y León presentó para el establecimiento de la Red Nacional de Vías Pecuarias, cuya creación prevé la propia Ley de Vías Pecuarias, según informa la Junta.

La Red General de Vías Pecuarias se plasmará en la obtención de una capa cartográfica que, utilizando las modernas tecnologías de Sistemas de Información Geográfica (SIG), podrá ser consultada, una vez ultimada, por los ciudadanos además de por las Administraciones. La Junta pretende que el trabajo que supone para los técnicos SIGMENA representar gráficamente los más de 32.000 kilómetros de vías pecuarias que aporta Castilla y León al montante nacional, no sólo sirva para su consulta, sino que además se traslade al Catastro y al Registro de la Propiedad, para que estos bienes públicos se recojan de la manera más fidedigna posible en estos registros. Esto no solo supondría su mejor definición y defensa, si no también, la de las fincas limítrofes con vías pecuarias. Por cada kilómetro de vía pecuaria, se estima que hay 20 colindancias, lo que equivale a más de 600.000 parcelas en Castilla y León.