La Asociación RIONOR (Red Ibérica Occidental para una Nueva Ordenación Raiana) se ha posicionado en contra de la apertura de la mina a cielo abierto Valtreixal en el término fronterizo de Calabor. La asociación creada para defender los derechos e intereses de las poblaciones de los territorios rayanos de baja densidad en el Noroeste Ibérico, discutió el proyecto para la instalación de la mina a cielo abierto de extracción de wolframio, Valtreixal, y decidió pronunciarse en contra.

 

Entre los motivos que alega la asociación señalan que, “si bien somos conscientes de que se necesitan emprendimientos para fijar poblaciones en esta región y que todos tienen impactos ambientales, la instalación de la Mina Valtreixal en Calabor a cielo abierto, lamentablemente genera muy pocos puestos de trabajo y el daño es incalculable, recayendo en los territorios de Portugal solo la contaminación de ríos y tierras cultivadas”.

 

La instalación de la mina contribuye a la destrucción del medio ambiente y hábitats de fauna muy diversificada, daña los cultivos agrícolas, impide el desarrollo de emprendimientos turísticos y contribuye al grave problema del éxodo rural.

 

La obtención de un miligramo del mineral buscado, precisa la movilización de una o varias toneladas de materiales acompañantes, algunos de ellos incompatibles con la vida, que ahora están estabilizados y después quedan en superficie, a la intemperie y llevados por los agentes meteorológicos a las zonas de cultivo y diluidos en las aguas y ocupan las capas freáticas superficiales.

 

Este proyecto se ubica en una zona de alto valor ecológico “incluida en su totalidad dentro de la Red Natura 2000, una zona protegida por Directivas europeas, y es incongruente con la filosofía de la Reserva de la Biosfera “Meseta Ibérica" donde se encuentra este territorio”.

 

Las Administraciones “no tienen legitimidad para tomar decisiones que pongan en peligro la vida de las poblaciones que residen a ambos lados de la frontera y que todas estas comunidades colindantes tienen derecho a ser escuchadas y respetada su voluntad, por no ser islotes independientes y aislados”.