El operativo contraincendios, entre los que participó al menos del helicóptero de la base de Villaralbo, consiguió extinguir el incendio forestal que el miércoles por la tarde se extendía por la vertiente lusa del Cañón del Duero internacional, por Picote, amenazando las masas forestales próximas de Fornillos de Fermoselle y Mámoles, que cuentan con un extraordinario alcornocal y un excelente jimbral, respectivamente.
La extinción del fuego ha llevado una cierta serenidad a los vecinos de los pueblos zamoranos, que no esconden su temor a que un incendio traspase el Duero y afecte a zonas de sobresaliente valor ecológico y con un interesante aprovechamiento del recurso del corcho en el caso del alcornocal.
El temor a que las llamas que saltan por el territorio, prácticamente todos los años, tiene en vilo a los dueños del alcornocal de Fornillos de Fermoselle que, además, no pueden mantener una limpieza a gusto de la masa forestal por los imperativos de la Política Agraria Común. El escenario se halla poblado de jaras, escobas y otra vegetación que se contempla como un verdadero combustible en caso que se origine un incendio o alcancen las llamas el lugar. También enebral de Mámoles es otro de los escenarios sobresalientes del Arribe.
El gran incendio que abrasó la zona en agosto de 2018 llegó a las puertas del alcornocal de Fornillos tras calcinar todo el territorio de Pinilla de Fermoselle y una gran extensión en Fermoselle, en cuyo término se originó.
