La población de velutina (avispa asiática) crece en el Parque Natural de Arribes. Este año se deja ver en algunos colmenares del espacio protegido en unos niveles desconocidos hasta la fecha, elevando con ello la preocupación para el sector de la apicultura, que teme las repercusiones que pueda tener en los apiarios e incluso para las personas vulnerable a los picotazos de esta avispa, que a veces tiene graves resultados como ha quedado puesto de manifiesto en Galicia.

El integrante de la Unión Profesional de Apicultores de Zamora, Apis Durii, y apicultor, Daniel Fidalgo, eliminó el pasado sábado “con un ramajo de escoba” dos ejemplares en el mismo colmenar, pero lo que más le llama la atención es que “este año esta especie invasora se ve en mayor cantidad” de ejemplares.

Apunta el apicultor que de momento solo se tiene constancia de su presencia en la vertiente del Tormes, y, como aspecto algo más positivo considera que la mayor presencia puede facilitar el hallazgo de nidos si se hace un seguimiento de alguno de los ejemplares o estando atentos a las entradas o salidas, y la dirección que toman las velutinas.

El año pasado, ante la aparición de unos contadísimos ejemplares, se realizó alguna búsqueda “por parte de una patrulla de agentes medioambientales y más gente”, pero sin resultado positivo alguno.

El responsable de la Unión Profesional de Apicultores de Zamora, Apis Durii, Francisco Alonso, considera que el pasado año no se hicieron por parte de la Administración regional los esfuerzos exigidos para atajar una posible colonización de efectos tan nocivos para las abejas y otros insectos.

Avispa asiática.

“Ya es tarde. Tenían que haberse puesto las trampas antes” expresa, y subraya el hecho de que se observen más asiáticas da idea de que haya más de un nido. “Es una muy mala noticia para el propio Parque Natural. Es un crimen que entre en la zona un bicho de esta naturaleza porque buena parte de la biodiversidad de insectos se verá afectada.Trincan lo que pillan” manifiesta. Sin embargo, afirma que “los más afectados serán los colmenares porque la velutina sabe que son una fuente de recursos, de abejas entrando y saliendo, y cargadas de néctar”.

Para Alonso “la medida más urgente es la de buscar, localizar y destruir los nidos. Era urgentísimo el año pasado y ahora no queda otra que liquidar los nidos de forma que no puedan sobrevivir avispas. Es una obligación de las autoridades, que la Junta de Castilla y León ponga los medios para exterminar y, si tiene que contar con los apicultores, aquí estamos. La Administración tiene que llevar la iniciativa porque es la competente, más dentro de un Parque Natural”. “No sabemos cuantas reinas han podido fecundarse pero puede haber varios nidos y se trata de liquidarlos ahora, con búsqueda o método troyano porque, de no hacerlo, dentro de tres años el problema será muy grave en el Parque Natural” señala el apicultor.

El sector ya reclamó a la Junta que acometiera de manera urgente medidas para evitar la consolidación y expansión de la avispa asiática (vespa velutina). Lo hizo en 2018 cuando se desveló su presencia en Zamora, en zona de Hermisende y de la Tejera, gracias a la captura de dos ejemplares realizada por la apicultora de Castromil María Felipa Nieto.