La localidad de Vidayanes ha sido protagonista del incendio más grande regisrtado en los 9 primeros días de la campaña de riesgo alto de fuegos forestales. Las llamas se extendieron por una parcela agrícola, quemando más de 52 hectáreas de cereal y rastrojo, y no llegaron a tocar terreno foresal. Para su extinción bastó con una dotación de bomberos municipales y una autobomba, y la ayuda de un agente medioambiental de la Junta de Castilla y León.

Este incendio fue provocado por un rayo que cayó cerca de Vidayanes a las 17.33 horas del miércoles.

Este no fue el único fuego provocado por las tormentas de los dos últimos días. Esa misma tarde otro rayo prendió un monte de Cabañas de Aliste, obligando a movilizar al helicóptero de Villardeciervos, una cuadrilla de especialistas, una cuadrilla de tierra, una autobomba y un bulldozer, y a tres agentes medioambientales, aunque finalmente se quedó en un conato por su reducida extensión.

Cerca de allí, en Abejera, caía otro rayo cerca de la media noche que provocó un incendio que quemó aproximadamente una hectárea de matorral.

En la tarde de ayer sucedía algo parecido en la comarca de Sayago, concretamente en el término municipal de Fresno, donde un rayo provocaba a la una del mediodía un incendio en una zona de pastos que fue sofocado gracias a la intervención de una cuadrilla de especialistas en la lucha contra incendios forestales, una autobomba, el helicóptero de la base de Villaralbo y dos agentes medioambientales. Se quemaron 0,12 hectáreas.