El Santuario Mariano Diocesano de Peregrinación de Nuestra Señora la Virgen de la Salud de Alcañices, único de su estilo en las Diócesis de Zamora y Braganza-Miranda en la Raya de España y Portugal, abre desde hoy permanentemente sus puertas para que todas las personas que así lo deseen, muy en particular devotos alistanos y trasmontanos, puedan acceder al templo. Se abre así la oportunidad de venerar a la patrona de la comarca de Aliste y conocer y admirar el patrimonio material e inmaterial de la iglesia abierta hacia el año 1541 por los frailes de la Orden Tercera de San Francisco.
La apertura tendrá lugar 6 de los 7 días de la semana y coincidirá con los horarios de la Oficina Internacional de Turismo Hispanolusa de la Raya (de martes a sábado entre 11 a 14 y 16 a 19 horas) puesta en marcha por el Ayuntamiento de Alcañices en el Centro Cultural (Convento). Hay una técnico en turismo contratada gracias a la ayuda del Patronato de Turismo de la Diputación de Zamora hasta el 31 de octubre y se espera mantener hasta el 31 de diciembre de 2020.
El antiguo centro monástico (iglesia y convento) se ubica en un punto clave para los devotos (Camino Portugués de la Ruta de Plata, de Sevilla a Santiago de Compostela, y para los turistas (Itinerario europeo 82 de Helsinki a Oporto a través de la Nacional 122 que pasa a su lado y de la Autopista Trasmontana).
Será el prologo al 2021 (Año Santo Compostelano), centenario procesional de la actual talla de La Salud (de 1920) suspendido ayer a acusa del Covid-19; y la muestra histórica de arte sacro de España (Aliste) y Portugal (Tras Os Montes) que se traslada definitivamente al próximo año: del 13 de mayo al 31 de octubre. Alcañices, Aliste y Tras Os Montes y Alto Douro vivieron ayer el más atípico y a la vez incongruente día 2 de julio, "Día de la Patrona Alistana", donde sus miles de devotos no pudieron venerar como manda la tradición y es habitual en ellos con su romería internacional a su Gran Señora la Virgen de la Salud.
En una fecha reservada desde tiempos inmemoriales en el alma y corazón de los alistanos y alistanas, niños, jóvenes y mayores, vecinos y emigrantes, para venerar a su protectora contra todos los males (enfermedades) pedirle favores de salud, hacerle ofrendas y agradecerle su gracias divinas. Paradojas de la vida, una pandemia, la del Covid-19, impidió celebrar la romería internacional, que si contó con misas, pero sin las ofrendas, sin confesiones, sin adoración de la antigua reliquia y sin la tradicional Eucaristía Mayor de Acción de Gracias.
Las misas no llegaron ni a completar el aforo permitido: con entre 24 devotos en una y 69 en otra. Merece la pena destacar los romeros de Tola que como año si acudieron y andando: tres varones y once mujeres, entre ellos Sofía Prieto Martín de 3 años y Juliana Ramajo Fernández de 60. Cumplieron: peregrinación, misa y después a comer los magníficos churros con chocolate del churrero Ángel López de La Atalaya. Leire y Maider Pérez de vacaciones desde el domingo en Palazuelo también acudieron a Alcañices a la misa a "Pedir salud por nosotros y nuestros abuelos".
En cuanto a la venta de churros Ángel Pérez reconoce que apenas ha habido variación con respecto a otros años con romería sin embargo si vendió menos cafés y chocolate: "La gente cuando terminan la misa se acerca a La Atalaya compran varias docenas de churros, pero se los llevan a su hogares y los degustan allí tranquilamente". En los bares se notó mucho que sigue habiendo miedo a posibles contagios.
Así mismo no hubo ni habrá ninguna de las tres procesiones: la de "Las Antorchas" (las "Vísperas" del 2 y la posterior quema de urces), la multitudinaria cada año del Día Grande de ayer 2 y la de hoy de carácter local donde los alcañizanos suelen desfilar desde la "Fuente Herrada" para hacerle la ofrenda floral.
