La reserva hídrica de la provincia de Zamora se mantiene en cifras de récord a las puertas del verano. A día de hoy, los pantanos acumulan 1.512 hectómetros cúbicos de agua embalsada sobre una capacidad de 1.767, lo que se traduce en un 85% de su capacidad total, frente al 69% registrado en la misma fecha del pasado año. Y todo ello, a pesar de que Ricobayo rebaja de manera notable la media, al situarse en un 84% de capacidad, frente a la holgura con la que superan el 90% el resto de concentraciones acuosas que se reparten por la cuenca del Duero a su paso por el territorio. Echando la vista aún más atrás, la realidad es que los actuales datos pulverizan cualquier registro de los últimos diez años, donde la media a estas alturas del año se situaba en un 77% de agua embalsada. En este periodo estival, la sequía no va a ser un problema.

El embalse de Ricobayo, el de mayor envergadura de la provincia de Zamora, acumula a día de hoy 969 hectómetros cúbicos de agua sobre una capacidad que asciende hasta los 1.145, lo que le sitúa en unos guarismos del 84%. Se trata de unos datos absolutamente extraordinarios a las puertas del verano, cuando lo habitual suele ser alcanzar picos del 75% de agua embalsada, con poco más de 800 hectómetros cúbicos en el pantano. Las precipitaciones del invierno y la primavera han jugado, en esta ocasión, un gran papel para la reserva hídrica del territorio.

En el resto de embalses zamoranos, la situación es aún mejor que en el de el Esla. Es el caso, por ejemplo, de Nuestra Señora de Agavanzal. Con 35 hectómetros cúbicos acumulados sobre una capacidad total de 36, se encuentra al 97,2% según los últimos datos actualizados en el Boletín Hidrológico del Ministerio para la Transición Ecológica. Le siguen de cerca Villalcampo y Valparaíso, ambos con un 92% de agua embalsada. En el caso del primero, acumula 61 de 66 hectómetros cúbicos, mientras que el segundo mantiene 156 sobre 169 hectómetros. Una barbaridad, teniendo en cuenta las estadísticas de los últimos años.

Cernadilla, el segundo embalse por capacidad de almacenaje de agua, está actualmente en 232 hectómetros cúbicos sobre un total de 255; es decir, casi al 91%. Por último, Castro mantiene 24 hectómetros cúbicos sobre sus 27 totales de capacidad, lo que le rebaja la media hasta el 88,8%. Los datos del Boletín Hidrológico ofrecen buena muestra de las reservas de agua que ha conseguido mantener la provincia de Zamora después de unos periodos bastante preocupantes en los que la sombra de la sequía sobrevolaba por las cabezas de los ciudadanos. Este bien natural está garantizado, merced a unas cifras que resultan de absoluto récord para estas alturas del año.