La tercera movilización promovida por COAG en Aliste reunió ayer a más de 200 personas en San Vitero. Tras Boya y San Vicente de la Cabeza, ayer los vecinos volvieron a salir a la calle porque no quieren oir hablar de recortes en la sanidad pública. "Podemos pasar un día sin pan pero no sin médicos" expresaba el representante de COAG, José Manuel Soto, ante manifestantes de toda condición y edad en San Vitero.

Si algo dejó claro el líder agrario es que "vamos a seguir dando la batalla y a ver quién es el que ríe el último". Recordó otras reivindicaciones lideradas por COAG que llegaron a buen puerto, como el arreglo de la carretera de Porto o el mantenimiento del tren entre Puebla y Valladolid. Soto llamó a la "resistencia" porque puede tener un final feliz, como ha ocurrido con el paritorio de Verín, en Galicia ("bien es verdad que con las elecciones a la puerta"). Y de la misma forma alertó sobre lo ocurrido en la Montaña Palentina (Barruelo de Santullán), donde se eliminan las Urgencias los fines de semana y se pretende incluir a voluntarios en la asistencia sanitaria. "Esto ha encendido las alarmas en comarcas como Aliste, Sayago o La Carballeda, por eso no podemos bajar la guardia; no pueden pretender arreglar la Sanidad dando unos cursillos".

José Manuel Soto advirtió que el Plan Piloto, que se podrán en marcha en Aliste en marzo, "de entrada provoca la desaparición de cuatro médicos; la Junta ya tiene su objetivo marcado, dicen que aunque haya médicos en la bolsa no van a contratar a ninguno. Esto es una provocación para la gente que vivimos en los pueblos, la sanidad es la esencia del mantenimiento de la población, que no vengan luego con las cantinelas de la despoblación porque lo importante es mantener unos servicios público dignos" explicó Soto ante los vecinos concentrados en San Vitero y una pancarta donde se leía "Sin médicos no hay futuro".