El campo dice "basta". Las principales organizaciones agrarias en la provincia, COAG, UPA y Asaja, saldrán con sus tractores a la calle el próximo 30 de enero. Será en Zamora, a las 12 de la mañana, con inicio en la Delegación Territorial de la Junta y final en la Subdelegación del Gobierno, las dos administraciones (autonómica y estatal) contra las que agricultores y ganaderos alzarán la voz "por unos precios dignos y más respeto al mundo rural".

En ese lema se resume la reivindicación de un sector agrario que está temblando ante la temida pérdida de competencias del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en favor de una dispersión del desarrollo rural o bienestar animal hacia los ministerios de Transición Ecológica o Derechos Sociales, cuyos titulares son Teresa Ribero y Pablo Iglesias respectivamente.

A la permanente demanda de los precios justos o una negociación de la PAC que no suponga recortes para la agricultura y la ganadería, se suma ahora la inquietud por una pérdida de competencias que puede repercutir en el ya castigado mundo rural.

Todas ellas son razones para que las organizaciones agrarias hayan decidido una movilización que "es solo el principio" de las que pueden venir, aventuró el secretario regional y provincial de UPA, Aurelio González, en la rueda de prensa conjunta, con los líderes zamoranos de COAG, Lorenzo Rivera, y Asaja, Antonio Medina, para presentar la movilización del día 30 de enero que escenifica la unidad de acción aprobada por los sindicatos a nivel nacional.

"Aunque el Gobierno esté recién nombrado pedimos que se tengan en cuenta los problemas del sector, que no pueden esperar cien días porque nos jugamos muchos en un momento en que se están negociando los presupuestos de la PAC y hay que defender que no haya recortes cuando se nos va a exigir más condicionalidad y más verde" argumentó Lorenzo Rivera.

El líder de COAG verbalizó la preocupación del sector "cuando se está hilvanando que la competencia de Desarrollo Rural pase a Teresa Ribera (ministra de Transición Ecológica); eso puede ser un varapalo tremendo para el Ministerio de Agricultura y no queremos un ministro florero, por eso vamos a alzar la voz para que se corrijan a tiempo los problemas".

Rivera desgranó los problemas que afronta el sector, lastrado por una pérdida de renta en 2019 cercana al 9 por ciento, mientras "soportamos elevados costes de producción en fitosanitarios, fertilizantes, gasóleo, electricidad y maquinaria". Con "700 explotaciones de vacuno de leche desaparecidas el año pasado en España, casi dos diarias".

Las organizaciones profesionales agrarias reclaman también una regulación de los mercados europeos e internacionales, una "buena negociación" del Brexit con el Reino Unido porque el sector se juega "mucho". O la necesidad de modificar la Ley de la cadena alimentaria, incluyendo en ella la venta a pérdidas.

El responsable de COAG alertó también de las consecuencias para el sector si sube el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), lo que supondría un aumento del 50 de los costes laborales. "Muchas explotaciones no lo van a poder asumir "y a esto CC OO no dice nada".

Aurelio González justificó también la movilización por lo que consideró "el segundo problema del sector después de los precios", como son los daños de la fauna salvaje "que van a conseguir echarnos del campo". El líder de UPA advirtió de que "no podemos tener ya 7 ataques diarios de lobos en Castilla y León", e incidió especialmente en los daños ocasionados por el jabalí y conejo. "Estas especies deberían declararse como plagas y además se tendría que permitir a los cotos hacer gestión directa sin necesidad de pedir permisos para la caza porque sino el problema se nos va de las manos". Sobre el jabalí apuntó el peligro como transmisor de enfermedades, especialmente la tuberculosis bovina, "por eso exigimos el mismo control en las explotaciones de jabalí que para las ganaderas".

El responsable de UPA fue más allá y propuso que "si la Junta no tiene dinero suficiente para asumir los pagos de daños que aplique un impuesto a los habitantes de las ciudades para que colabores en los gastos de la fauna salvaje". Porque "está claro que si en vez de cultivos los animales se comiesen nóminas, el problema ya se habría solucionado".

Antonio Medina se refirió al "acoso, criminalización y desprestigio que estamos sufriendo los agricultores y ganaderos en redes sociales y medios de comunicación en un intento de criminalizar al sector que no vamos a permitir". El líder de Asaja censuró que "se nos culpe de todos los males del cambio climático cuando la ganadería contamina el 8% y la agricultura el 4%, mucho menos que la aviación o los grandes transportes".