Los niños de El Cubo del Vino disfrutaron de una noche mágica en su localidad con la llegada de los Reyes Magos de Oriente que pasearon por las calles del pueblo y después recibieron las cartas de los más pequeños.

Esta mañana, todos los que habían sido buenos, vieron como las peticiones que habían hecho en las cartas a SUS Majestades, se habían cumplido.