La Diócesis de Zamora informó ayer del fallecimiento del sacerdote Primitivo Gutiérrez Chimeno.

El párroco Primitivo Gutiérrez falleció en el día de ayer en la residencia de mayores "La Inmaculada Concepción" de Villalpando, a los 92 años, tras 69 de sacerdocio.

Precisamente, según informa la Diócesis, ejerció de capellán de este centro de mayores en los últimos tiempos, compaginándolo con su encargo como vicario parroquial de Villalpando.

Primitivo nació en Villalpando en el año 1927 y se ordenó sacerdote en 1950. Realizó sus estudios en León y se licenció en Estudios Eclesiásticos por la Universidad Gregoriana de Roma.

Buena parte de su ministerio lo desarrolló en la diócesis de León. Fue coadjutor de Cistierna, ecónomo en Santa Eulalia de Valdeón, encargado de Santa Marina de Valdeón y Caín. Posteriormente, fue párroco de Santa Eulalia de Valdeón y ya en 1953 regresa a la diócesis de Zamora como coadjutor de Villalpando.

En 1954 es nombrado capellán de las Clarisas de Villalpando y en 1957 párroco de San Esteban del Molar. Diez años más tarde desempeñó el cargo de ecónomo de Santa Marta de Cerecinos de Campos y de San Juan, y años más tarde se convirtió también en el párroco. A estas parroquias se sumaría también la de Tapioles.

En 1999 cesó en los anteriores cargos y fue nombrado vicario parroquial de Villalpando por seis años y también ejerció como capellán de la residencia "La Inmaculada Concepción" de Villalpando, en la que ha residido en los últimos años, hasta la fecha de su fallecimiento. El funeral tendrá lugar hoy a las 12.00 horas en Villalpando, en el convento de San Antonio de las Clarisas, y será enterrado en el cementerio de la localidad