Los vecinos de Brandilanes (municipio de Fonfría) denuncian que en otoño siguen abasteciéndose con camiones cisterna y exigen soluciones. La principal causa está, en la poca cantidad de agua que dan los acuíferos que se han perforado hacia La Raya, y a que estos dan arsénico en abundancia. La segunda causa, apuntan, es que existe una fuga en el depósito. Se basan para ello en que la bomba del pozo trabaja igual -lo delata el contador de consumo eléctrico- haya o no agua en las casas: sacaría agua pero no llega a las viviendas. La escasez de líquido obliga a cortar el suministro durante 17 horas diarias (de 9 de la noche a 2 de la tarde). Ello origina dos problemas añadidos, según los propios vecinos: "Quienes viven en la zona baja del pueblo tiene agua más tiempo, pero sale muy turbia, y los que residen en la parte alta reciben el agua clara pero con menos presión y se quedan sin ella antes".