La elección de Aliste como "campo de pruebas" para un nuevo modelo de ordenación sanitaria que pasa por quitar el médico de la mayoría de consultorios rurales ha despertado desde el minuto uno preocupación y rabia entre los vecinos de la zona, entre ellos todos los alcaldes que no han tardado en expresar su firme oposición: "La Zona Básica de Salud de Aliste, sus habitantes y pacientes, no permitiremos, ni por las buenas ni por las malas, la supresión de las consultas médicas en nuestros centros de atención primaria de los pueblos, nos opondremos y no aceptaremos bajo ningún concepto el vergonzoso, humillante y tercermundista Plan de Ordenación Sanitaria de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León con la puesta en marcha de los consultorios de referencia". Así, por unanimidad, lo manifestaron nada más conocerse el plan .

Los alistanos y alistanas sentencian que "sí la consejera de Sanidad, Verónica Casado, y el director general de Planificación y Asistencia Sanitaria, Alfonso Montero Moreno, quieren hacer experimentos que los hagan en su casa o que se vengan a vivir una temporada a Aliste, sin coche oficial y con una pensión de alrededor de 700 euros y así pueden probar ellos su propia medicina que no es sino un esperpento".

El plan ha desatado un mar de duras críticas, en particular contra el Gobierno de la Junta (Ciudadanos y PP) al que se exige "mantener servicios e incrementar la calidad de vida de los habitantes del medio rural y no condenarnos a una muerte segura, nuestra y de nuestros pueblos".

Sobre los "razonamientos" de Francisco Igea, portavoz de la Junta, le recuerdan que "los 30 habitantes, 27, 8 o 50 que vivimos en los pueblos más pequeños (en Aliste casi la mitad) también somos personas, enfermamos, tenemos derechos y podemos morir si no llega el médico" y piden "su dimisión y que no acuda a ayudar: porque viene a apagar fuegos con gasolina".

La Mancomunidad "Tierras de Aliste", más Pino del Oro, ha convocado una reunión de urgencia para hoy en Alcañices donde los13 alcaldes (PP y PSOE) definirán una estrategia a seguir que en todos los casos, hay consenso, será una oposición frontal y total sin concesiones: "Médicos y enfermeras continuarán pasando sus consultas como hasta ahora, eso es innegociable. Lo que hay que hacer y vamos a luchar por ello es mejorar en todo aquello que sea posible, prestaciones económicas, condiciones de trabajo y cubrir las plazas que haya vacantes para que puedan desarrollar su labor dignamente".

Los futuros consultorios rurales agrupados son una auténtica incongruencia y así lo demuestra el primero cuya composición geográfica se conoce con 17 pueblos de 4 municipios diferentes: Fonfría, Pino, Samir y Gallegos del Río. En el caso del partido médico de Gallegos del Río (Valer, Domez, Puercas, Tolilla, Lober y Flores) se dará la circunstancia que los vecinos serán derivados a un consultorio rural agrupado (Fonfría), situado para ellos a más distancia que el Centro de Salud de Aliste en Alcañices. El autocar no va directo y los pacientes deberán recorrer una media de entre 60 y 80 kilómetros (ida y vuelta) para ser atendidos por el médico.

El transporte a la demanda siembra otra polémica: "Es considerado una temeridad. En esta comarca la mayoría de la población somos jubilados, con más de 80 y 90 años, que no tenemos coche o no podemos conducir. Esto no es un plan de choque es un siniestro total que nos va a costar la vida a muchos: vaya tétrica forma de garantizar el Estado del Bienestar. Es patético trasladarnos concentrando en un autobús durante horas y kilómetros a personas enfermas con diferentes patologías y en muchos casos con las defensas bajas. Muchos vamos a ir al médico con un mal y volveremos con tres".

Bernardo Casado Fernández, alcalde de Viñas, es contundente: "Esto es una barbaridad que ni podemos ni vamos a consentir. Si se atreven a ello yo soy el primero en dimitir para que la Junta de Castilla y León gobierne a sus anchas. Yo me presenté a alcalde y me eligieron los vecinos para defender y estar al servicio de los ciudadanos no de políticos de medio pelo. El señor Fernández Mañueco y la consejera de Sanidad Verónica Casado tienen que salir y dar la cara y frenar este despropósito que ni Aliste ni los alistanos les vamos permitir".

En la misma línea se muestra Fernando González Rodríguez, alcalde de San Vicente de la Cabeza: "Si nos quitan médicos y consultas de los centros médicos locales al día siguiente voy a Valladolid y le entrego el bastón de mando y que vengan a solucionar ellos los problemas de los pueblos porque en vez de darnos soluciones para progresar lo que hacen es tomar medidas que van contra los pueblos y sus vecinos", y se muestra muy duro con la idea de extender al medio rural la consulta no presencial, atendiendo a los pacientes vía telefónica: "A veces parece que nos toman por tontos. No saben lo que dicen: Vamos a ver, si en muchos de nuestros pueblos no hay telefoneo móvil ni internet, la fija se avería durate semanas. ¿Cómo va a atender el médico vía telefónica si no tenemos servicio para hacerlo?".

Francisco Luis Domínguez, vecino de Tola asevera: "Si quieren mantener la gente en los pueblos tienen que apoyarla, la prestación de servicios sanitarios porque al final, si no estamos aquí atendidos, hasta los jubilados que amamos nuestros pueblos nos iremos a vivir a la ciudad".