Los accidentes de tráfico provocados por la fauna son cada vez más frecuentes en las carreteras de Zamora, tanto que en ocasiones ya suceden incluso en los cascos urbanos, como sucedió recientemente en Alcañices.

Un bombero forestal que recorría los escasos cuatro kilómetros que separan su puesto de trabajo en Vivinera de su casa en la villa alistana tuvo una desagradable sorpresa cuando ya llegaba a su destino, a apenas 200 metros de las primeras casas habitadas de Alcañices.

Allí se topó con un enorme jabalí que impactó con su vehículo particular, el cual quedó inutilizado. El animal murió en el acto, un macho de casi 90 kilogramos de peso que salía de darse un baño en el arroyo de Sah.

Se da la circunstancia de que este mismo vehículo, un Seat León amarillo, ya tuvo el año pasado dos accidentes, en el intervalo de una semana, con sendos corzos y también en carreteras alistanas.

En esta época del año, en la que ya han dado comienzo los aguardos a jabalíes y ciervos, la fauna se mueve espantada atravesando carreteras y caminos de forma repentina.