La Comisión de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de las Cortes de Castilla y León debate esta tarde la Proposición No de Ley presentada por el PSOE, en la que insta a la Junta a realizar estudios para determinar zonas afectadas por enfermedades y amenazas de especies invasoras del castaño -chancro, tinta y avispilla- y realizar tratamientos y, en su caso, sanear los sotos públicos y privados.

El procurador José Ignacio Martín Benito defiende la dotación "de ayudas específicas para el sector de la castañicultura, con el objetivo de erradicar y prevenir las enfermedades del castaño, llevar a cabo acciones y programas de coordinación entre las instituciones de Portugal, Galicia, Castilla y León y Extremadura". Los socialistas apuntan que el PP votó en contra el pasado mes de febrero, cuando la Proposición No de Ley no prosperó y con la disolución de las Cortes no hubo posibilidad de que esta iniciativa fuera debatida en sesión plenaria. Por ello se vuelve a presentar para su debate en la nueva legislatura.

El área natural del castaño en España (unas 140.000 hectáreas) se extiende desde Galicia a Navarra, con ramificaciones en el noroeste de León y de Zamora. La producción en Castilla y León se centra principalmente en las provincias de León (El Bierzo), Zamora (Aliste y Sanabria), Salamanca (Sierras de Francia y Béjar) y Ávila (El Tiemblo, Cuevas del Valle y Barranco de las Cinco Villas).

La comunidad comercializa 8.000 toneladas de castañas con sello de garantía en España, Francia, Italia y América, principalmente. Al recurso económico que supone para las zonas productoras, hay que añadir, apunta el PSOE, "la impronta en las tradiciones populares como los magostos de otoño sobre todo en las zonas serranas y áreas castañeras de Castilla y León".

La Junta comenzó a convocar en 2015 ayudas para el castaño dentro del Programa de Desarrollo Rural de Castilla y León (2014-2020). "No obstante, se precisan ayudas específicas destinadas a erradicar y prevenir las enfermedades del castaño" defiende el PSOE.