El lobo ha vuelto a Fresnadillo de Sayago. El ganadero Juan Manuel Garrote sufrió el pasado jueves un nuevo episodio en su explotación, que esta vez se ha saldado con 9 ovejas muertas, al menos una decena de heridas y otras desaparecidas. Pese a que el rebaño se encontraba en una finca cercada de piedra y reforzada con malla ganadera en las zonas donde la pared está más caída, el depredador superó los obstáculos dejando un reguero de animales muertos y otros tantos heridos.

Juan Manuel Garrote, que lleva unos cuatro años padeciendo ataques de lobos en su explotación, había dejado el rebaño cerrado sobre la 1 de la madrugada del pasado jueves en la finca situada al lado de la carretera de Fresnadillo a Bermillo y cuando volvió a las 6.30 horas se encontró con varios cadáveres esparcidos y otras ovejas mordidas.

Desde el pasado 10 de agosto, cuando el lobo le mató un cordero, llevaba más de un mes de tranquilidad, hasta que el jueves el lobo volvió, como certificaron en su informe los agentes medioambientales. "Llevo este año más de 40 animales muertos, más los que he perdido en los últimos cuatro o cinco años; esto no hay quien lo aguante" expresaba Garrote. "Y lo malo no son las que ha matado el lobo, es que muchas quedan tocadas y acaban cayendo".