Zamora ha acabado exitosamente con la plaga de topillos. Así lo constataba ayer el Grupo de Trabajo Provincial del Topillo, que reúne a todas las administraciones, organismos públicos y organizaciones profesionales involucradas en la lucha contra esta plaga que este año volvió a amenazar zonas de la provincia como Tierra de Campos.

La delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Clara San Damián, presidió el encuentro tras haber asistido el pasado lunes a la reunión a nivel regional que se celebró en Valladolid. San Damián destacó ante la prensa que se han evitado mayores males "gracias al excelente trabajo y al esfuerzo coordinado de todas las Administraciones, desde ADIF o la Confederación Hidrográfica del Duero hasta la Diputación Provincial de Zamora, que empleó su parque de maquinaria -que dirige el vicepresidente Javier Faúndez- en realizar un trabajo preventivo" en las cunetas de las carreteras.

No obstante, la delegada advirtió que "no podemos confiarnos y hay que estar preparados" debido a la facilidad con la que se reproducen los roedores, que en cualquier momento pueden volver a multiplicar su población. Generalmente, la abundancia de agua favorece la proliferación de estos pequeños mamíferos que en otras campañas agrícolas han causado verdaderos estragos, por lo que habrá que estar pendientes a lo largo del otoño, invierno y primavera de la evolución de las poblaciones para prevenir la plaga.

Entre las medidas empleadas este año contra el topillo campesino han estado el volteo o arado del suelo agrícola para la destrucción de huras, así como la lucha biológica mediante el empleo de aves rapaces, depredadores naturales de estos pequeños roedores que, por lo tanto, ayudan a combatir la plaga.